No hacía túneles, pero ahhhhhhhh cómo pasaba toneladas de drogas de un lado para el otro. Por esa nociva habilidad, Tse Chi Lop es considerado El Chapo de Asia… y, así como el excapo mexicano con el que se le compara, ya está en el tambo.
Tse Chi Lop es señalado como líder de la organización criminal conocida como “The Company”, la cual –supuestamente– tiene dominado buena parte del tráfico de drogas entre Asia y Oceanía, lo cual, en términos de dinero, representa por ahí de 17 mil millones de dólares anuales.
El Chapo asiático –nacido en China, pero con pasaporte de Canadá– fue detenido en el aeropuerto de Ámsterdam el pasado viernes, esto a petición de las autoridades de Australia, según reporta El País. Ahora, lo que sigue en el destino de Tse Chi Lop es enfrentar un proceso de extradición solicitado por los australianos, quienes señalan que 70% de las drogas ilegales que se mueven en su país es por obra del susodicho.
Aunque todavía no tiene su serie, Tse Chi Lop es uno de los narcos más buscados del mundo. De hecho, según indica la BBC, la policía de Australia le siguió la pista por más de 10 años antes de conseguir su detención el pasado viernes, justo cuando se disponía a abordar un vuelo con rumbo a Canadá.
El Chapo asiático ya había estado en prisión
De 56 añitos, Tse Chi Lop es señalado como el responsable de mover drogas sintéticas –como metanfetaminas y otros estupefacientes de diseño– por rutas que cubrirían a varios países de la zona Asia-Pacífico. Según un reporte de la ONU, esto lo hacía camuflando las drogas en paquetes de té.
Seeee, quizás no tan extravagante como lo que hacía El Chapo con sus túneles, pero –de acuerdo con lo que indica El País– Tse Chi Lop manejaba a The Company de una manera más disciplinada y sofisticada que varios cárteles de Latinoamérica… además que sus integrantes son menos propensos a la violencia.
Pues bueno, no será la primera vez que Tse Chi Lop pise la cárcel: ya lo había hecho antes, luego de ser hallado responsable de tráfico de drogas en Estados Unidos. En aquella ocasión su abogado logró que sólo le dieran nueve años de prisión.
¿Tan poquito? Pues sí, luego de pedir clemencia… que porque sus padres lo necesitaban, estaba arrepentido y deseaba comenzar una nueva vida. Evidentemente esa nueva vida que escogió era muy parecida a la anterior y así es como oootra vez va pa’l tambo.