Hoy la policía rusa realizó una redada masiva de inmigrantes en el distrito Biryulovo, Moscú y detuvo a 1,200 con el fin de verificar documentos legales e investigar que no tengan antecedentes criminales
La redada tuvo lugar después de los desórdenes ocurridos allí el domingo para exigir avances en la investigación del asesinato de Yegor Shcherbakov, la reunión degeneró en disturbios. Seis policías resultaron heridos. La fiscalía abrió una causa penal por gamberrismo. Un millar de personas participaron en los disturbios de ayer y 380 fueron detenidos, según informó la policía de Moscú en su página web y en medios locales como el periódico ruso RIA Novosti.. La policía ha recibido la orden de encontrar al asesino, tan pronto como sea posible y Putin ha sido alertado la situación, dijo la oficina del alcalde.
Las multitudes gritaban “Rusia para los rusos” y “poder blanco”; los manifestantes destrozaron tiendas, atacaron a los guardias de seguridad, y lanzaron martillos y botellas a la policía. Cientos de jóvenes irrumpieron un mercado de verduras lleno de inmigrantes, porque suponían que ahí se escondió el asesino. No se encontró ningún sospechoso, pero los manifestantes rompieron ventanas del mercado, destruyeron automóviles.
El asesino es buscado por la muerte de Yegor Shcherbakov, asesinado a puñaladas frente a su novia la semana pasada. La identidad del asesino es desconocida, pero las cámaras muestran una persona de origen caucásico o asiático, lo que añade más leña al fuego de la discriminación racial que ha estado ardiendo en Rusia desde hace años.
El presidente Vladimir Putin se enfrenta a un desafío cada vez mayor de los grupos nacionalistas tensiones entre los rusos étnicos y los trabajadores migrantes. En diciembre de 2010, cientos de policías antidisturbios fueron desplegados para sofocar los disturbios raciales cerca de la Plaza Roja,provocadas por los disparos de un aficionado al fútbol de las provincias musulmanas del sur de Rusia.
Un video de la revuelta mostró manifestantes gritando “rusos para Rusia, Moscú para los moscovitas” ondeando banderas rusas. Estas agresiones son una de las manifestaciones más notables de la intolerancia y la xenofobia arraigadas en muchas partes de la sociedad rusa.