Las redes sociales mexicanas tienen un talento especial para sacarte una sonrisa hasta en los momentos más delicados. Tan solo unos días después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmara que dio positivo a COVID, en internet ya se venden productos relacionados con el evento.
Específicamente, se ofrecen algunos escudos protectores, llamados popularmente como Detentes, con la imagen del presidente.
Los amuletos, que simulan ser unos símbolos religiosos tradicionales, incluyen en una cara la reconocida caricatura de AMLO creada hace algunos años por el monero Hernández.
En el otro lado, viene una leyenda en apoyo a la salud del presidente y un mensaje en contra de sus opositores políticos. “Detente pandemia, inflación, prianista, conservador, adversario, chayotero, neoliberalista… que el tigre del pueblo bueno y sabio está conmigo”, se lee en letras impresas.
Se pueden encontrar en la página de Mercado Libre.
El precio por una pieza del Detente de AMLO es de 350 pesos, pero los vendedores en la plataforma digital incluso ofrecen la promoción de llevarse 200 piezas por 30 mil pesos.
Los amuletos, además de mostrar apoyo al presidente, recuerdan uno de los momentos más emblemáticos de los últimos meses: cuando sacó uno de esos escudos protectores en su conferencia mañanera y señaló que “el escudo protector (contra el COVID) es la honestidad”.
Más allá de detentes, ¿cómo va de salud?
Más allá de memes y detentes, lo importante en estos momentos es la salud del presidente.
La noche del domingo 24 de enero, AMLO confirmó que había dado positivo a COVID-19 y que presentaba algunos síntomas leves. En ese momento comenzó a trabajar desde su casa, despachando a distancia y dejó de asistir a su conferencia en Palacio Nacional.
Un día después, las autoridades federales anunciaron que había presentado febrícula, dolor de cabeza y mejoraba poco a poco.
Hugo López-Gatell señalaría horas después que un equipo de médicos estaba al pendiente de la salud de AMLO, que había entrado en vigor un plan de contingencia que ya tenían preparado y que, por respeto a la privacidad del presidente, no estarían informando a cada rato de su estado físico.