A finales de diciembre del año pasado, en Francia Amirouche Hammar comenzó a tener tos seca, fiebre y algunos problemas para respirar, por lo que llegó a pensar que se trataba de una gripe habitual y algo fuerte. Cualquiera de nosotros hubiera pensado lo mismo en ese tiempo, cuando (OJO) ni siquiera China había reportado los primeros casos de coronavirus que originarían la pandemia que ahora el planeta sufre.
Sí, ahora el diagnóstico inicial se ha modificado y provocaría una vuelta de tortilla en la investigación de la propagación de la pandemia de COVID-19, ya que los médicos que trataron a este hombre de Francia de 43 años, están convencidos de que lo que tuvo fue, en efecto, coronavirus.
Ante este importante hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha recomendado que los países que tengan muestras de pacientes con neumonías sospechosas a finales del 2019, las analicen, como pasó con el caso del pobre de Amirouche y así identificar más casos.
El caso de Hammar
Cuatro días después de que Amirouche Hammar fue internado en un hospital de Francia, es decir, el 31 de diciembre de 2019, China apenas informaba a la OMS varios casos de neumonía por causas desconocidas detectados en la provincia de Wuhan.
Con esto se podría indicar que el virus ya circulaba fuera del país asiático desde mucho antes de lo que se tenía pensado, ya que hasta ahora los primeros casos positivos de coronavirus reportados en Francia habían ocurrido el 24 de enero.
El misterio más grande, lo que hizo que explotaran las cabezas de los médicos y científicos, es que Hammar no tienen ninguna conexión con China.
Este martes, luego de que fuera informado sobre su “nuevo diagnóstico”, Amirouche contó a BFM TV: “Me dijeron, usted ha dado 100% positivo a COVID-19”. Luego agregó: “Me sorprendió, en vista de los estragos que hace esta enfermedad”.
¿Cómo se dieron cuenta del caso ?
Este sorprendente descubrimiento, y un tanto lamentable para el pobre pescador de origen argelino, se realizó en abril en Francia, cuando el médico Yves Cohen, jefe de los servicios de cuidados intensivos del Hospital Avicenne de Bobigny y del Jean-Verdier, decidió revisar todos los casos de neumonía que registraron los médicos entre diciembre y enero para someterlos a pruebas específicas para buscar el tan mencionado SARS-CoV-2.
De los 14 casos seleccionados, y de los que también disponían de las pruebas PCR que les habían practicado en su momento, sólo uno, el de Hammar dio positivo.
Sobre este descubrimiento, Cohen en un artículo firmado por varios médicos que participaron en la investigación en la publicación “Science Direct”, declaró: “La ausencia de un vínculo con China y el hecho de que (Hammar) no hubiera realizado un viaje reciente sugiere que la enfermedad ya se estaba extendiendo entre la población francesa a finales de diciembre de 2019”.
OMS sugiere que países realicen test a casos de neumonía de diciembre
Ante estas indicaciones, el portavoz de la OMS, Christian Lindmeier coincide en que no sería extraño que el coronavirus ya se encontrara fuera de China en fechas tan tempranas, ya que “los primeros casos se remontan a principios de diciembre y entra dentro de lo posible que algunos de los infectados viajaran desde Wuhan a otros países”.
De hecho, también el portavoz sugirió: “Sería de gran importancia que todos los países con casos sin especificar de neumonía en diciembre, o incluso en noviembre, realicen test, y algunos ya lo están haciendo”.
Además agregó que estos estudios aportan una visión más clara de la pandemia y son importantes para entender mejor el potencial de contagio del coronavirus.
Cohen sugiere más investigaciones
A pesar de que ya se ha comenzado a investigar y analizar a los familiares de Amirouche Hammar, Cohen indica: “Se requieren más estudios para evaluar el comienzo actual del SARS-CoV-2 en Francia, la extensión real de contaminación de SARS-CoV-2 en la población a finales de 2019 y enero de 2020 y explorar las potenciales muertes desapercibidas en esos momentos”.
Porque a pesar de que la enfermedad está considerada como responsable de 86.334 casos y 12.210 hasta el 10 de abril en Francia, “nuestros hallazgos sugieren que esas cifras podrían estar subestimando el impacto real del COVID-19”, señala Cohen y el grupo de médicos en su artículo.
Cuando Amirouche Hammar empezó a tener a finales de diciembre de 2019 tos seca, fiebre y problemas para respirar, pensó que la gripe le había dado fuerte. Hoy, el diagnóstico ha cambiado. Los médicos están convencidos de que lo que tuvo fue covid-19https://t.co/ue09ckEu4A
— EL PAÍS (@el_pais) May 5, 2020
*Con información de El País