Para que no digan que no hay variedad (aunque sea de nombres). A la del “Pato” Zambrano y Silvano Aureoles, que esta semana dieron a conocer sus aspiraciones presidenciales, sumen estas otras dos. Bueno, oficialmente sólo una. El otro todavía dice que lo está pensando.
Valiéndole las críticas contra su administración, el gobernador de Morelos, el perredista Graco Ramírez, oficializó sus intenciones para ser candidato de su partido a la presidencia de la República en 2018. Esto a tan sólo un día de que su compañero en el Sol Azteca, Silvano Aureoles, hiciera lo propio por medio de redes sociales.
Según comentó Graco, para los de su partido no resultará nuevo conocer de sus aspiraciones presidenciales. Ahora, sólo espera que se hagan públicas las reglas de elección de abanderado, las cuales –sugiere– deben ser con miras tener “un solo candidato de oposición democrática en México”.
En clara postura de “todos contra AMLO”, el morelense señaló que lo que se requiere es la creación de una gran coalición en la que estén presentes sectores del PRI, PAN, PRD, y que sea capaz de “generar una nueva construcción del régimen político mexicano que ya se agotó”.
“El otro proyecto [cof, el de AMLO, cof] es el personalista, de quien dice que va a llegar [a la Presidencia] y va a salvar al País, es un proyecto parecido al de Trump. No les importan los partidos sino les importan las personas”.
Más preocupado por los partidos que por la gente, Graco culpó a López Obrador de la actual situación del PRD: “se llevó a una buena parte del partido, y sigue todavía tratando de llevarse a la gente que no tiene consistencia, convicciones suficientes. Andrés Manuel formó Morena para ser candidato por tercera vez en un proyecto totalmente individualista”, señaló para el diario Reforma.
Pero bueno, al menos no se podrá señalar a Graco de botar el changarro. De acuerdo a sus cálculos, las reglas para elegir candidato serán dadas a conocer por ahí de agosto. Él termina su gestión en septiembre, así que no hay mucha bronca… no como la de “El Bronco”, quien al igual que Silvano Aureoles, apenas agarraron hueso y ya quieren otro.
Aunque sin oficializar su destape, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, aseguró que, en caso de querer ir por la presidencia, no le pedirá permiso a EPN para buscar una candidatura. ¿Y qué tiene que ver Peña Nieto? Bueno, de acuerdo con Proceso, el secretario general de Gobierno en Nuevo León, Manuel González, recientemente reveló que el Estado y la Federación estaban en negociaciones para que “El Bronco” se lance para el 2018.
Una vez que ya la regó González, en su reciente gira por el Estado Enrique Peña Nieto quiso componer el asunto… y fracasó de forma notable, ya que hizo más evidente el posible apoyo del que muchos ni estaban enterados.
“Dicho sea de paso, señor gobernador, a propósito de las varias notas que he visto, hoy le quiero comprometer toda la disposición de parte del gobierno de la República para apoyar los esfuerzos que realiza su gobierno para servir a Nuevo León” (…) ¡Y hasta ahí nos quedaremos, señor gobernador, en apoyo de gobierno a gobierno! Cualquier otra cosa de esas que se dicen por ahí son especulaciones y afirmaciones que están fuera de lugar. Este gobierno apoyará al gobierno de Nuevo León para que le sirva a Nuevo León”.
Por su parte, Rodríguez Calderón también quiso negar cualquier quiso negar cualquier negociación con el gobierno federal. Bueno, sí hay una… pero sólo para intercambio cultural, para tener más recursos. “Yo no le voy a pedir permiso al presidente. Yo encantado de no tener al PRI del lado mío. Eso es algo grandioso. No le pediré permiso más que a los nuevoleoneses, se los he dicho a ustedes en ese sentido, si decidiera yo hacer eso”.
