La ciudad que nunca duerme tiene nuevo alcalde, y ¡es demócrata!, se trata de Bill de Blasio.
Según The New York Times, la ciudad tenía 20 años sin un gobernante del partido de Obama. El nuevo alcalde tiene una historia interesante, tuvo que sobreponerse a muchos problemas familiares, logró estudiar en la Universidad de Nueva York, donde fundó una coalición estudiantil que sirvió para examinar las finanzas de la universidad y el aumento de la participación de los estudiantes en la toma de decisiones. Después estudió una maestría en relaciones internacionales en la Universidad de Columbia, se graduó y se unió a la oposición a la intervención estadounidense en Nicaragua.
Su activismo lo llevó a conocer y, finalmente, casarse con la escritora Chirlane McCray, escritora afroamericana, quién, alguna vez, se identificó como lesbiana (¿?). Ambos crían una hermosa familia biracial.
Si esto no lo hace peculiar, su padre tenía ascendencia alemana y sus abuelos maternos eran inmigrantes italianos. Su padre fue un veterano de guerra, perdió parte de una pierna en la batalla de Okinawa, el gobierno sospechaba que él y su esposa eran comunistas, se volvió alcohólico, se divorció de su esposa y se suicidó en 1979 mientras sufría un cáncer de pulmón incurable.
Fuera de que su vida y la de su padre son dignas de un capítulo de algunos de los programas de ciertas televisoras, el señor de Blasio ha tenido una carrera política interesante que se corona con su último puesto como Ombudsman de Nueva York. De Blasio tuvo una política contra muchas medidas del antiguo alcalde Michael Bloomberg, sobre todo en el área de educación.
Parece que la venganza de Bloomberg será dejarle a de Blassio una Nueva York que está casi en la bancarrota según las propias declaraciones de Bloomberg.
Según el antiguo alcalde, los principales problemas de esta ciudad son:
«Visión a corto plazo, corrupción, mala administración y quizá, la más peligrosa de todas, intereses particulares»
Es chistoso que lo mencione ya que él gobernó esa ciudad los últimos 12 años.
De Blassio veía con enfado la política de austeridad que planteaba Bloomberg, quien buscaba recortar los programas sociales. El día de ayer De Blasio expresó:
«Hoy ustedes han pedido fuerte y claro una nueva dirección para nuestra ciudad»
«Estamos unidos en la creencia de que nuestra ciudad no debe dejar a ningún neoyorkino atrás»
«La gente de esta ciudad ha elegido un camino progresista, y esta noche ella se establece como una sola ciudad»
Así que, para sacar el dinero que le falta a la ciudad, de Blasio abogó por mayores impuestos para los ricos. Este dinero quiere usarlo, en primera instancia, para un sistema universal de educación preescolar
También se comprometió a mejorar las oportunidades económicas de las minorías y de los barrios de la clase trabajadora.
En fin, siendo una de las ciudades más pobladas del continente americano (la más poblada es la Ciudad de México), y una de las ciudades estratégicas más importantes a nivel mundial, de Blasio tiene una tarea difícil, y es que Nueva York está más dividida que nunca, los pobres son muy pobres y los ricos excesivamente ricos. Veamos cómo logra resolver los problemas más apremiantes de su ciudad.