Algunas personas dirán que fue porque el puente estuvo mal diseñado o porque el material utilizado no fue el mejor… pero el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, dice que la culpa del desplome del puente colgante (cuyo video se viralizó en redes) fue de la gente. Pa’ qué brinca…
Quizás basándose en el señalamiento oportuno de internautas que notaron que, previo a la caída estrepitosa del infame puente, un fulano pegó un brinco (para luego agarrarse de la estructura para no caer al vacío), el alcalde de Cuernavaca echó su (muy chafa) justificación.
“Fue una imprudencia de quien empezó a saltar. No resistió el peso y nos caímos cerca de 20 personas”, comentó Urióstegui, quien estuvo presente en el penoso accidente e, incluso, su esposa fue una de las personas que resultó lesionada.
Además del brinquito de la persona (aunque el alcalde asegura que fueron varios los que hicieron la “imprudente” acción) José Luis Urióstegui señaló como causa del desplome del puente el hecho de que había más gente de la que se debía.
Pues bueeeno, en lo que el alcalde de Cuernavaca se pone de acuerdo (o, mínimo, manda a especialista a investigar y determinar), Protección Civil local dio a conocer que, a causa del desplome del puente, ocho personas resultaron con heridas de consideración. Lamentablemente, hay dos que están reportadas como “graves”.
Un poco en contra de las justificaciones del alcalde Urióstegui, el director de Protección Civil de Morelos, Enrique Clement Gallardo, comentó a Milenio que no había razón para la caída del puente… sobre todo porque éste había sido recientemente restaurado:
“Se supone que debió haber cumplido con todas las condiciones de seguridad, desconocemos esta parte, no hemos tenido información de que se fuera a utilizar, pero a final de cuentas se debió hacer una revisión a fondo”, explicó el funcionario.
Sobre el asunto también declaró el gobernador de la entidad, Cuauhtémoc Blanco… sin aportar mucho: sólo se limitó a indicar que lamentaba el accidente ocurrido en la inauguración del llamado Paseo Ribereño. Y ya: en caso de que algo se ofrezca, ahí nomás échenle un grito.
De acuerdo con un comunicado del gobierno de Morelos, la rehabilitación del puente formó parte del proyecto que implicó a todo el “Paseo Turístico Ribereño Alfonso Sandoval Camuñas”… y bueno, aunque sí hubo presupuesto implicado para darle su manita de gato a la zona, éste no salpicó al puente colgante. Es decir, dicho puente sí se rehabilitó, pero no con presupuesto del proyecto.
¿Entonces? Eso no explica el gobierno de Morelos, echándole la bolita a la administración municipal de Cuernavaca. Lo que sí presume es que hay otro puente (uno peatonal) y ése sí les quedó perrón (según): se le invirtió 985 mil 768 pesotes y tiene estructura metálica y toda la cosa.