Desde el 2010, nuestro vecino del norte ha estado operando un centro de espionaje desde su Embajada en México.
Así lo difundió la periodista Carmen Aristegui el día de hoy en su programa en MVS Noticias. La investigación, encabezada por Daniel Lizárraga, dio a conocer un documento desclasificado del Pentágono que informa la existencia de un Centro de Espionaje.
En palabras de Lizárraga:
«Se trata del Centro de Fusión México, instalado dentro de la Embajada de Estados Unidos en la cual trabajan oficiales del pentágono, agentes de inteligencia de la defensa y, sobre todo, agentes de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA)»
Así es, la misma NSA que ha vigilado a gobernantes y ciudadanos por todo el mundo y la cual fue expuesta por el el ex colaborador y ahora asilado político Edward Snowden.
No es la primera vez que nos enteramos del espionaje que realizan en nuestro país, antes ya se había descubierto el espionaje del que fueron víctimas tanto Peña Nieto como el ex presidente Felipe Calderón.
El oficio que encontraron también revela que el Centro Fusión México estaba orientado hacia objetivos de alto valor. Objetivos de alto valor es una expresión que también aparece en los documentos filtrados tanto por el medio brasileño O Globo como por la revista alemana Der Spiegel cuando expusieron el espionaje contra Dilma Rousseff y los presidentes mexicanos.
Aristegui mencionó en su programa que el documento fue obtenido mediante la Ley de Transparencia de Estados Unidos y es una investigación que se hizo por parte de Noticias MVS en colaboración con The National Security Archive.
Según la reconocida periodista, el gobierno estadounidense instaló equipo tecnológico de punta en nuestro país para dedicarse a esta actividad.
El investigador Jesse Franzblau, del National Security Archive (organismo no gubernamental) expresó:
«El documento nos muestra que los programas de inteligencia de los Estados Unidos en México parece que caminan por dos vías distintas, por un lado los Estados Unidos ha trabajado con el Gobierno de México en el intercambio de información para combatir el tráfico de drogas, el crimen organizado y sabemos del Centro de Fusión»
«Estos Centros de Fusión han sido celebrados públicamente por los dos Gobiernos, pero por el otro lado, podemos ver que los Estados Unidos ha trabajo en secreto, en una (acción) ultra secreta, donde no permiten (acceso) a las autoridade mexicanas. El Centro de Fusión ahora podemos confirmar que el NSA han participado en el apoyo de las bases de información sobre objetivos de alto valor»
Según la investigación, no hay constancia de que Felipe Calderón tuviera conocimiento de este Centro y sus actividades ya que la información estaba calcificada como que no se puede compartir con extranjeros.
Los informes fueron escritos por Will Weschler, funcionario antinarcóticos del Pentágono, para Mike Vickers, asistente del Departamento de Defensa.
En el documento se sugiere crear celulares regionales al norte y al sur del Centro de Fusión (sólo que estos sí serían del conocimiento de las autoridades mexicanas).
Felipe Calderón había aceptado la creación de Centros de Fusión para atacar al narcotráfico, pero este Centro que se ubica en la Ciudad de México no era parte del plan del ex presidente mexicano.
En el documento se detalla que el Centro de Fusión México tiene, por lo menos, 10 computadoras conectadas al Protocolo Secreto de Internet y al Sistema Mundial de Comunicaciones de Inteligencia.
Además, el centro también está conectado a un sistema global de transmisión que provee de comunicaciones satelitales de orden militar, tiene dos estaciones para monitoreo satelital y equipo de comunicación segura de datos y voz.
En el centro de espionaje estadounidense, que se encuentra en la Avenida Paseo de la Reforma en el Distrito Federal, laboran tres elementos del Comando Norte, uno de la Agencia Geoespacial, otro de la Agencia de Inteligencia de la Defensa y otro más de la NSA.
¿Y ahora? ¿Qué procede?
***Vía MVS Noticias
