Luego de los recientes sucesos en la escuela primaria de Sandy Hook en Newtown, Connecticut, en la que varios niños perdieron la vida a manos de un asesino, diferentes poblaciones en Estados Unidos están tomando sus medidas: algunas para prevenir y otras para reaccionar ante actos semejantes.
En Los Angeles la población ha decidido desarmarse en respuesta a una campaña que consiste en la recompra de armas, y en una jornada que ya quisiera Miguel Ángel Mancera, se entregaron cerca de 2 mil 37 armas de fuego, algo que ni las mismas autoridades angelinas tenían contemplado.
Pero dicha iniciativa no es reciente, ya que data desde 2009, y según informan los responsables, con ella se ha logrado disminuir notablemente la violencia en sus calles: suena algo lógico, ya que desde su implementación, la campaña ha recaudado cerca de 10 mil armas. “Durante mucho tiempo estas peligrosas armas han contribuido a incontables muertes y tragedias innecesarias”, señaló el alcalde de Los Angeles, al entregar los resultados de esta campaña en la que, a cambio de armas, se entregaron tarjetas de regalo con valor de 100 y 200 dólares… incluso 166 armas fueron entregadas sin recibir nada a cambio.
Por otra parte, en Utah piensan que si ya tienen las armas, lo mejor es aprender a utilizarlas, y si las tienen los profesores, mejor. Lo anterior puede inferirse ya que cerca de 200 profesores están en pleno entrenamiento en el manejo de armas, el cual es ofrecido por el Estado.
“Si tenemos la capacidad de parar algo, debemos hacerlo”, señala Jessica Fiveash, una de las asistentes a dicho entrenamiento, el cual es una medida con la que se piensa que los profesores pueden hacer frente a personas como el atacante de Newtown , Connecticut.
A la par hemos conocidos de otras iniciativas parecidas en Estados Unidos, por ejemplo, en Arizona se ha propuesto que los profesores tengan un arma en las escuelas o en su caso que en cada institución educativa haya al menos un agente debidamente armado y cuidando las instalaciones, y quién más para proponer esto que la Asociación Nacional del Rifle.
En fin, desarmar o aprender a usar las armas ¿ustedes qué preferirían?