De 2018 a la fecha, los casos diagnosticados de VIH en México han ido en aumento constante. Tan solo el año pasado (2022) se contabilizaron oficialmente 17,620 casos nuevos; el máximo histórico en los registros nuestro país.
El último año que aparece en las bases de datos del Gobierno (2019) es también el año con más fallecimientos por VIH en dos décadas. No es casualidad.
El desabasto de medicamentos para prevenir casos nuevos de VIH, así como la falta de tratamientos para los pacientes ya conocidos está agravando la crisis a cada día.
La situación está de la patada. Entre recetas no surtidas, pésima atención y tratamientos incompletos, los hospitales públicos en México dejan a miles de personas en el abandono. La única opción que les queda es pagar precios de locura por su tratamiento —o acudir a una organización, quienes tampoco se dan abasto, en busca de ayuda.
Sin tratamientos de prevención… ¿y las PrEP?
Desde hace más de dos años, el IMSS anunció con bombo y platillo que implementarían el método de PrEP en sus clínicas. Al menos en el papel, parecía una excelente noticia.
Pero a ver, vámonos lentito. ¿Qué changos es la PrEP? ¿Por qué es tan importante?
La PrEP o Profilaxis PreExposición es un método de prevención de VIH súper interesante y efectivo. Consiste en tomarse una pastilla diario, a un horario programado, para disminuir considerablemente las posibilidades de contraer el virus. Ayuda muchísimo a cuidar a las personas en riesgo… ¡y lo estaban poniendo gratis en el IMSS!
Bueno. Dizque. Ahí está el problema.
La realidad es bastante preocupante. Según una investigación de Marcela Nochebuena en Animal Político, el IMSS se ha quedado muy corto en estos tratamientos.
En dos años (2021 y 2022) solo 7 mil personas han recibido tratamiento y más del 75% de ellas estaban en la CDMX.
“En 15 estados, menos de 50 personas tuvieron acceso a estos medicamentos; en otras cinco, únicamente de 50 a 100 personas”, revela Nochebuena. Encontró que en 9 estados de México, de plano, no le dieron PrEP a nadie. A ninguna persona.
La situación es igual de canija en el desabasto de medicamentos para las personas que buscan tratamiento para VIH.
Desabasto de medicamentos para el VIH
El desabasto de medicamentos en todos los aspectos de la salud en México es un asunto verdaderamente preocupante. De acuerdo con el colectivo Cero Desabasto, tan solo el IMSS no ha surtido los tratamientos 37 millones de recetas en los últimos dos años.
37 millones de recetas no surtidas para todas las enfermedades; una situación que, por supuesto, afecta a las personas que viven con VIH.
“Ahora hay desabasto de varios medicamentos incluida la penicilina y la negación de forma permanente a la vacuna de Hepatitis B”, reclamaba Alain Pinzón, un activista de la organización VIHveLibre, que ayuda a las personas que lo necesitan a encontrar sus medicamentos con donaciones. “En ocasiones atendemos hasta 17 personas en un solo día solo para donarles ARVS de seguimiento a tratamiento”.
Otra investigación de Marcela Nochebuena en Animal Política reveló que 40% de las personas que reciben medicamentos, los reciben a través de organizaciones sociales.
Es por eso que la denuncia del desabasto de medicamentos para el VIH llegó a la Marcha del Orgullo LGBT+ 2023 en una propuesta histórica.
El grupo conocido como Bloque Disidente planea romper piñatas en las calles, representando al IMSS, al CENSIDA y a Hugo López-Gatell.
“Piñatón para romper la inacción, la indiferencia y el acoso”, comenta el Bloque Disidente que, además de exigir soluciones al desabasto de medicamentos de VIH también pide que se compren vacunas para la viruela símica; otro pendiente más del Gobierno de México con la población LGBT+.
