Después de perder a Emily, Ricardo y Dulce aún se mantienen en pie, firmes para que haya justicia en este caso porque así se lo prometieron a su bebé —y además, no quieren que otra familia pase lo mismo que ellos vivieron en una clínica de Coacalco, Estado de México.
Emily nació el 11 de junio. Todo marchaba bien aquel viernes hasta que la bebé comenzó a rechazar sus comidas y se hizo evidente la falta de profesionalismo del personal médico de la Clínica Integral Materno Infantil —ubicada en Coacalco, Estado de México—, e incluso la falta de recursos y equipo que derivó en la muerte de la recién nacida, como lo ha denunciado la familia Vázquez-Nieto.
Ese día, Ricardo y Dulce pasaron de la alegría a un proceso que los ha llevado a la angustia, la tristeza por la pérdida de su bebé pero también a una travesía aún llena de inconsistencias y un camino para que este caso no quede impune.
#JusticiaParaEmily
“No queremos otorgar perdón, no queremos dinero, no queremos conciliar, no nos interesa nada de eso. Sí sabemos que nada nos va a regresar a nuestra bebé, eso es más que evidente, pero nosotros queremos hacer justicia porque se lo prometimos a nuestra bebé.
¿Por qué? Porque queremos que paguen los responsables, verlos tras las rejas, que les quiten sus cédulas profesionales y que no vuelvan a ejercer más, que cierren la clínica”.
El papá de Emily, Ricardo Vázquez, aceptó platicar con Sopitas.com para explicar el caso y hacer eco a su denuncia, ya que las inconsistencias no se quedaron sólo en la Clínica Integral Materno Infantil.
De acuerdo con Ricardo, después de la muerte de Emily, las autoridades municipales se quedaron cortas para atender a la familia —de hecho, no tomaron las declaraciones de la pediatra, del dueño de la clínica, ni mucho menos de las enfermeras que atendieron a Emily durante ese 11 de junio.
La situación no se quedó ahí, ya que los trámites para los estudios de patología tendrán que ser evaluados por la Fiscalía Regional de Ecatepec —a cargo de la Fiscalía General del Estado de México—, después de que las autoridades de Coacalco tardaran en responderle a la familia.
“No le dieron continuidad a la carpeta”
El mismo día que nació, Emily pasó varias horas sin comer y no fue hasta el turno vespertino que las enfermeras reportaron esta situación.
La pediatra tardó en llegar a la clínica y una vez en las instalaciones, revisó a la bebé, determinó que todo estaba normal pero que debía ponerle suero para evitar una deshidratación.
Ella salió de la habitación donde Emily y sus papás estaban, acompañada por otra chica y una enfermera… hasta que a los 10 minutos, relató Ricardo, se escucharon gritos.
Ricardo salió a ver qué sucedía y se encontró a las tres mujeres desesperadas porque no hallaban cómo atender a Emily. No había medicinas, no contaban con el equipo a la mano, no había un médico o una médica de guardia y sólo había una enfermera.
Esas fueron las fallas que notó el papá de Emily.
Luego, cuando llegaron las autoridades municipales —una caravana de patrullas, contó Ricardo—, no hubo un gran movimiento en contra del personal médico.
De hecho, Ricardo ha denunciado que las patrullas escoltaron a la enfermera, la pediatra y su acompañante a sus domicilios, bajo el argumento de que no podían detenerlas —o tomarles una declaración— porque no había una demanda como tal.
“Por protocolo tenían que hacerlo”.
El papá de Emily acudió a la Fiscalía de Coacalco para levantar la denuncia. “Me la amanecí ahí, literal. No había nadie, ni un representante de la clínica, nadie”.
Pero eso no fue todo. Además de la falta de responsabilidad del supuesto director de esta clínica —identificado por Ricardo como Hugo Salamanca, registrado en el Consejo Mexicano de Ginecología y Obstetricia—, la familia de Emily topó pared con esta fiscalía.
Ricardo Vázquez ha acusado que la Fiscalía de Coacalco intentó darle carpetazo al caso e incluso tuvo que acudir al Semefo de Ecatepec para tramitar los estudios de patología.
La Fiscalía Regional de Ecatepec tomó el caso
El jueves 17, Ricardo recibió una llamada telefónica de la Fiscalía Regional de Ecatepec y, sin saber a detalle por qué, él supo que este municipio llevaría su caso.
¿Qué sigue?
A una semana de la muerte de Emily, su familia continúa en espera de los resultados de patología —que tardarán entre 15 y 20 días—, mientras toca base con distintos abogados para iniciar en forma el proceso legal por negligencia médica en contra del personal de la Clínica Integral Materno Infantil.
Investigan denuncia por la muerte de una bebé en clínica de Coacalco, Edomex
¿Cuál ha sido la respuesta de las autoridades del Estado de México? Por lo pronto, la clínica ya fue suspendida. El ISEM (Instituto de Salud del Estado de México) y el ayuntamiento de Coacalco colocaron —cada uno por su parte— los sellos de suspensión en las instalaciones de la clínica.
Sin embargo, Ricardo ha denunciado que esta clínica —que cuenta con un par de denuncias en redes— intenta operar por otros medios, otras instalaciones y justo por esta razón, su demanda es aún más fuerte.
Por otra parte, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM) abrió una carpeta de investigación por la vulneración de los derechos de Emily y su mamá —aunque Ricardo reconoce que todas estas acciones son una consecuencia de la denuncia que él y Dulce hicieron en redes.
Ahora, a pesar de perder a Emily, Ricardo y Dulce están conscientes de que seguirán con el caso porque no quieren que otras personas pasen por esta experiencia y poder cumplir la promesa que le hicieron a su bebé: que habrá justicia.