A seis meses de que Ricardo y Dulce denunciaran la muerte de su hija Emily —una bebé recién nacida— por negligencia médica en Coacalco, Estado de México, aún no hay respuestas, no hay personas detenidas y los avances de la investigación son a cuentagotas.
De hecho, para la familia de Emily no hay nada certero en torno a la investigación, pues ha acusado la incorrecta recopilación de pruebas por parte de los peritos, la ausencia de explicaciones por parte del dueño de la Clínica y la falta de personal o tecnología en el MP para el análisis de las pruebas.
“A través de todos estos meses ha habido muchas inconsistencias que bien o mal uno ha ido como aprendiendo sin saber los términos que han ocupado”, contó Ricardo Vázquez, papá de Emily, a Sopitas.com.
#JusticiaParaEmily:
Emily nació el 11 de junio en la Clínica Integral Materno Infantil —ese fue el lugar que su mamá y papá programaron para el parto.
Todo iba bien aquel día hasta que la bebé comenzó a rechazar sus comidas y fue aquí donde se hizo evidente la falta de profesionalismo del personal médico, de acuerdo con la denuncia de Ricardo Vázquez.
¿La razón? Ricardo ha contado que las enfermeras tardaron en reportar que Emily no quería comer. Al avisar a la pediatra, ella demoró horas en llegar a la clínica y cuando llegó, la situación se le salió de control.
Sin personal médico de guardia, sin medicinas, sin contar con equipo de emergencia a la mano y oxígeno, Emily murió.
Los pocos avances
La familia de inmediato denunció al personal de esta clínica por negligencia médica.
Sin embargo, este fue el comienzo de un largo camino aún sin las respuestas que indiquen la causa de la muerte de Emily y que abra un proceso contra quienes resulten responsables.
Ricardo ha ido a citas con la Fiscalía Regional de Ecatepec —que atrajo su caso después de que en Coacalco le dijeran que ya habían dado carpetazo— y pidió la intervención de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) del Estado de México, cuya respuesta tiene un límite de 80 días…
Entre los pocos avances que la familia Vázquez ha visto es el seguimiento que Armando Sánchez, quien llegó apenas el 11 de septiembre como fiscal de Ecatepec, le ha dado al caso.
Fuera de eso no hay mucho. Tal vez la mención de un video de las cámaras de seguridad de la clínica y la reconstrucción de los hechos.
“Hace dos visitas que tuve en la Fiscalía me dijeron que tenían un video de las cámaras de seguridad y se ve a la médica forcejeando con el oxígeno”.
¿Y la reconstrucción?
“El 8 de julio se hizo una reconstrucción en la clínica, la gente de la Fiscalía, la del MP, nos citó a mí y a mi esposa porque ese día iba a estar el dueño, iban a estar las enfermeras y un perito, las doctoras no se presentaron, pero sí las enfermeras”.
Ricardo relató que aquel día la clínica sí contaba con oxígeno a la mano y bueno, que el dueño aseguró que siempre había sido así —cosa que no sucedió la noche que Emily murió.
Un rompecabezas
“Se siguen haciendo estudios. Me quedó claro que no se va avanzar en el tema de los estudios porque nos la han hecho cansada, que no tienen personal, no tienen tecnología, no tienen herramientas y eso ha sido en todos lados donde se han hecho los estudios”.
Hasta el momento, nos contó, la muerte de Emily está como indeterminada y los estudios están incompletos porque los peritos hicieron mal su trabajo.
¿Cómo? Ricardo denunció a los peritos por omisión desde el momento en que acudieron a tomar las muestras y pruebas, porque siempre a donde son llevadas, falta algo, la identificación de los elementos que les permitan decir: Emily murió por esta razón.
Las opiniones han ido desde un edema cerebral hasta pulmonar, problemas respiratorios de un bebé recién nacido.
Pero cada opinión derriba a la otra y no hay conclusiones —además, Ricardo insiste en recordar que cuando Emily nació se hicieron todas las pruebas para comprobar su estado de salud y todo salió bien.
Además de los estudios, la joven pareja ha tenido que enfrentarse a la falta de interés del abogado de oficio.
“Se tiene que hacer justicia para que no le pase a otra pareja”
Lo que Ricardo y Dulce persiguen es una respuesta y están decididos a no bajar los brazos, pese a que el dueño de la Clínica Integral Materno Infantil se desentendió del caso —incluso hasta cuando colocaron los sellos de suspensión en la clínica— y la investigación es un rompecabezas que se junta con el dolor.
“Yo sé en qué país vivimos, en qué estado vivimos todo esto es muy turbio, pero yo quiero llegar hasta el final.
Ha sido desgastante, estás en tu trabajo es algo que no te deja, es el pendiente que traigo todos los días, pero no quiero decir pues ‘ya ni modo’.
Y me digo, ‘no, cabrón, todavía no”.
Investigan denuncia por la muerte de una bebé en clínica de Coacalco, Edomex