Las encuestas más recientes indican que la morenista Delfina Gómez Álvarez y el priista Alfredo del Mazo Maza encabezan las preferencias rumbo a la votación del próximo 4 de junio en el Estado de México. Si la tendencia continúa como hasta ahora, la contienda en la entidad más poblada del país se definirá de última hora y entre estos dos políticos. Durante el periodo de campaña y el primer debate, más que propuestas, hemos escuchado acusaciones sin ton ni son entre los distintos candidatos. Una de las más afectadas por los ataques mediáticos ha sido la expresidenta municipal de Texcoco. Desde que inició la temporada de campañas, la maestra Delfina ha sido vinculada con personajes como José Luis Abarca, exedil de Iguala y relacionado con la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa. También se le acusó por haberse autopagado ilegalmente 440 mil pesos por concepto de “gratificación extraordinaria” y “finiquito laboral” cuando gobernaba en aquel municipio mexiquense; la candidata aceptó la información referente al bono que se dio al finalizar su gestión, pero arguyó que fue totalmente legal.
Uno de los temas que genera más suspicacia y duda sobre la abanderada de Morena a la gubernatura del Estado de México es el descuento de 10% que presuntamente realizó a los salarios de sus trabajadores mientras fue presidenta municipal de Texcoco. La suma de los descuentos ascendería a una cifra cercana a los 13 millones de pesos, acusan sus rivales. Ayer, 25 de abril, Josefina Vázquez Mota, candidata del Partido Acción Nacional (PAN), inquirió a Delfina sobre el tema en, al menos, cinco ocasiones. La maestra, que se volvió viral con la frase “superrequetebién” —al referirse a su posición en las encuestas—, no respondió. Tras los empellones y las descalificaciones que los candidatos se propinaron en el debate, Delfina declaró que la información era falsa. Este miércoles 26 de abril, la candidata Delfina Gómez admitió los descuentos a salarios de los empleados del municipio de Texcoco. Aunque acusó que hubo una filtración y que las cosas no son lo que parecen.
La maestra Delfina declaró que unos 200 trabajadores pidieron por oficio y de manera personal que se les descontará un porcentaje de su salario, vía nómina, para que este dinero se destinara a otros rubros, como la organización política. Cualquier cosa que eso signifique. La candidata morenista y exlegisladora federal dijo que la cosa fue tan legal que incluso, por eso, existen los documentos con los que Josefina Vázquez Mota apoya su acusación. Ese numerito del descuento, dijo Gómez Álvarez, fue tan parejo que también le tocó a funcionarios de primer nivel. “No existe delito ni irregularidades ni me he enriquecido para la administración pública”, dijo este miércoles la candidata de Morena. La exgobernadora de Texcoco defendió la legalidad de los descuentos a su plantilla argumentando que todos los partidos hacen los mismo y acusó al presidente Enrique Peña Nieto de haber filtrado datos personales de los colaboradores de su gestión.
De acuerdo con la maestra, el dinero de los descuentos no fueron a una organización de Higinio Martínez o para Morena, como ha acusado Vázquez Mota. Ricardo Moreno, representante de Morena frente al Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) dijo que partidos como el PRI o el PRD hacen lo mismo y que sus militantes tienen entre sus obligaciones aportar dinero cuando se forma parte de una “estructura administrativa pública o política”. ¿En serio esa es la defensa? Moreno fue más allá y aseguró que en el PRD están peor, porque allá descuenta hasta 15% del salario de sus trabajadores. ¡PLOP! Falta que se haga una investigación seria al respecto y se determine si existe ilegalidad o no. Pero con estos argumentos, sí aplica el “no me ayudes, compadre”.
