Como ya lo dijimos hace unos meses cuando les presentamos el video de un niño que escucha a sus padres por primera vez, los sentidos son parte fundamental para el desarrollo de las personas y cuando alguien carece de alguno y puede finalmente obtenerlo, debe ser una experiencia única.
Es complicado ver a un perro triste y cabizbajo pero el caso de Danny era muy especial. Era el actor principal de una historia digna de una película. Desde su nacimiento, le diagnosticaron cataratas y les dieron la posibilidad a los dueños de una operación cuando el can estuviera más desarrollado.
Fue así que a los cuatro meses de edad, y tras ver que el problema tenía triste al perrito, los dueños, Brett Franco y su esposa, lo llevaron al veterinario donde fue intervenido quirúrgicamente con éxito, ya que según sus palabras se golpeaba con todas las cosas a su paso.
Y como estas historias siempre tienen que tener un alma piadosa, la organización “Austin Human Society” cubrió todos los gastos y el cachorro, minutos después de la operación, ya estaba listo para jugar, cosa que asombró a todo mundo:
Sus primeros pasos fueron con cierto temor pero poco a poco comenzó a soltarse. Realmente la vista no es el sentido más desarrollado de los perros pero si que es importante. Ahora, Danny ya podrá ver a los gatos y correr detrás de ellos e ir justo al lugar donde están sus dueños cuando le llamen.