En los próximos días una ola obscura se apoderará de la Ciudad de México, los holandeses Clan of Xymox descenderán con alas negras para ofrecer un concierto en el que presentarán su más reciente trabajo, Matters of Mind, Body and Soul.
30 años de carrera y 15 álbumes en su discografía avalan el trabajo de esta incansable banda y su líder Ronny Moorings, que se ha dedicado a los quehaceres de distintos derivados de la música oscura. Darkwave, Goth, Synthpop, son algunas de las etiquetas con las que han encerrado a esta banda que se define simplemente como una banda de Rock. Igualmente los comparativos con otros de sus contemporáneos como The Cure o Joy Division, si bien, en un principio parecían un lastre que no dejaba apreciar a fondo la propia voz de la banda, al final resultó en una especie de publicidad inversa que les atrajo la atención del público y los medios. Esto se vio reflejado cuando el grupo fue seleccionado para ser el abridor de Dead Can Dance en una gira por Gran Bretaña, situación que derivó que la compañía 4AD, hogar de Bauhaus y Cocteau Twins entre otros, se interesara en ellos y los firmara de inmediato.
Desde su álbum debut el grupo se ha ido reinventando con cada producción, pasando por distintas corrientes, ambientes y altibajos. Uno de sus grandes álbumes es Twist of Shadows, en el cual cambiaron radicalmente de la música más “coral” y ambiental con ciertos guiños al Dance, a un Synthpop gótico de cadencias más hipnóticas que incluso encontró lugar en las pistas de baile de esferas más comerciales. Las cosas parecían comenzar a despegar para Clan of Xymox (que además acortó su nombre a Xymox como lo usaban al inicio de su carrera), pues con este álbum lograron vender 300 mil copias, sin embargo para su siguiente placa Phoenix, no lograron igualar al anterior y la filial de PolyGram en la que ahora estaban firmados los despidió de la compañía, a pesar de que contaban ya con una nutrida legión de fans en Estados Unidos. Sin embargo, esto no los amedrentó y siguieron trabajando haciendo lo que les salía del corazón, retomaron su nombre alargado y hasta la fecha se siguen manteniendo en el gusto de cientos de fieles alrededor del mundo.
En el año 2000 visitaron el Distrito Federal, dando un gran concierto en el Palacio de los Deportes dónde 20 almas fueron testigos de este show. El grupo regresaría a México para 2002 haciendo varias fechas en el D.F. y el interior de la república.
Así que en este show no sólo podremos disfrutar de piezas ambientales que nos pondrán en modo cadavérico/reflexivo, sino que también habrá muchos momentos para bailar al compás de esta legendaria banda, la cual es toda una institución de la escena obscura.
En el show estarán acompañados por una buena banda de Toronto, Decoded Feedback, quienes manejan un estilo mucho más duro, centrado en el Aggrotech y lo Electroindustrial que servirá bien para imprimirle calor a esta noche. La cita es en el Auditorio Blackberry el próximo 14 de Noviembre.