En agosto pasado, la Procuraduría General de la Ciudad de México dio a conocer que, en el primer semestre del año, fueron denunciados un total de 115 mil 34 delitos. Esto da en promedio 547 casos por día o, lo que es lo mismo, que cada tres minutos hubo robos, homicidios, corrupción de menores, abuso de autoridad, allanamientos de morada, delitos sexuales y cualquier otro delito del fuero común que se les ocurra… ¡cada tres minutos!
Sin embargo, lo anterior no es nada. La situación todavía está leve… al menos para el subsecretario de Inteligencia e Información Policial de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de la Ciudad de México, Ángel Eric Ibarra Cruz, quien es o se hace y dice que, pese a tales números (ofrecidos por una fuente oficial de la CDMX y en los que no se cuentan los delitos no denunciados) no hay elementos para hablar de crisis de seguridad. “Sólo se quiere hacer ver que hay una situación de riesgo, de alarma”, asegura.
De acuerdo con La Jornada, Ibarra cruz dice que las mediciones hechizas que circulan en internet y que difundes organizaciones interesadas en los temas de seguridad, se realizan con parámetros de hace décadas cuando la gente no era tan delicada y si era asaltada, picada, extorsionada, abusada sexualmente, se aguantaba… digo, cuando las mediciones de población, negocios, vehículos, etcétera, se hacían de formas totalmente distintas. Ejemplo, lo informado por el Observatorio Nacional Ciudadano: con los números de homicidios dolosos que se han registrado hasta el segundo cuatrimestre del 2017, se puede hablar de una “crisis” de seguridad pública en la Ciudad de México.
Pero, cuál… para el mando de la SSP capitalina, ocupar el lugar 23 de 32 de las entidades con mayor número de homicidios dolosos no pone a la CDMX en el escenario de riesgo que se dice. “Es verdad que ha habido un aumento en la incidencia a escala nacional en ese delito, pero todavía la SSP ha logrado mantener y contener esa ola o incidencia”, aseguró. “No estamos en contra de organizaciones que miden la incidencia y nos ayudan a trabajar en favor de la ciudadanía, pero que te diga que es una situación de alarma y riesgo, no es tal”, agregó.
Según los números del Semáforo Delictivo, en comparación con el año pasado, este 2017 ha tenido un incremento de 18% en el número de homicidios, siendo mayo y junio los meses en los que más casos se reportaron (103). Hasta septiembre pasado se habían reportado 808, con lo cual se coloca como el segundo año más violento de los últimos cinco: en 2013 y 2014 se reportaron 749 homicidios; en 2015, el número de casos fue 854 y, el año pasado, 952. Con dos meses restantes, se espera que el número de homicidios aumente.