A pesar de que ya habíamos agarrado buen ritmo descendente en los casos de COVID registrados a nivel nacional, en la última semana se registró un aumento de casos. En la semana epidemiológica 22 (la que acaba de pasar) se registró un incremento del 14% en el número de casos estimados con respecto a la semana anterior.
Y este aumento ya comenzó a hacerse palpable. Hace dos semanas el gobierno de la Ciudad de México anunció el pasea al añorado semáforo verde y quedarnos ahí nos duró dos semanas, este 18 de junio la Secretaría de Salud federal colocó a la capital en amarillo y todo parece indicar que, en efecto, ya regresamos al amarillo.
¿Esto qué significa? Que los indicadores registraron un ligero aumento, entre otras cosas, en los casos reportados de coronavirus.
Entre la fatiga de pandemia, la llegada y el avance de la vacunación contra COVID y demás factores, es importante recordar que la pandemia no ha acabado, aún no está controlada y el coronavirus sigue siendo peligroso a pesar de que los adultos mayores ya fueron vacunados.
Cosas que no debemos olvidar en la nueva realidad
- La vacuna no puede sola
A pesar de que ya llegaron las vacunas contra COVID-19 a México y todos los días se aplican más de 500 mil, no significa que todos ya estamos a salvo. Los adultos y jóvenes también se contagian de coronavirus, también desarrollan una enfermedad grave y también pueden perder la vida.
Incluso cuando una persona ya esté vacunada, recordemos el porcentaje de eficacia. En algunos casos la vacuna no nos protege por completo no de contagiarnos, pero sí garantiza el no desarrollo de complicaciones mortales. Eso sin mencionar las variantes registradas en todo el mundo.
- El cubrebocas y la sana distancia siguen siendo esenciales
Una vez más, aún no hemos vencido al COVID. Es por eso que a pesar de que muchas actividades ya se reabrieron y algunos ya regresaron de manera progresiva a la escuela/la oficina, debemos seguir usando cubrebocas, lavándonos las manos con frecuencia y manteniéndonos a una distancia considerable de los demás.
Todas las medidas que en su momento tuvimos que adoptar a nuestra realidad tienen que seguir ahí.
- Una posible tercera ola
De acuerdo con datos presentados en estimaciones del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME), de no seguir con el uso de cubrebocas y la sana distancia, la población en México podría vivir una tercera ola de COVID-19 a partir del mes de septiembre.
a partir de la segunda semana de septiembre México podría comenzar a contabilizar entre mil y mil 500 muertes por día (en el peor de los escenarios), algo que duraría hasta el mes de octubre cuando la curva comience a descender poco a poco. Las muertes para entonces ya rebasarían el medio millón.
Las cifras planteadas están relacionadas con una disminución en el uso del cubrebocas, que ha comenzado a ir en picada desde el inicio del mes de junio (sí, cuando la CDMX y el Edomex pasaron a semáforo verde), así como la movilidad que ha comenzado a incrementar en estos días.
- La fatiga de pandemia
A nivel mundial la gente está cansada de quedarse en casa, de no reunirse con sus amigos, de no salir de fiesta o de no viajar por lo que cada vez más hay una tendencia creciente a arriesgarse a los peligros del coronavirus, ya sea por deseo o necesidad.
Recordemos lo complicado que ha sido para el personal de salud, para los que lamentablemente perdieron a un ser querido, a los que se quedaron sin trabajo, a los que sufrieron y sufren de ansiedad y/o depresión, a la humanidad entera que se enfrentó a un virus que no conocíamos y nos tomó por sorpresa.
Aún no es momento de bajar la guardia.