Una cosa no es resultado de la otra, pero -para dinamizar la situación- les presentamos dos notas sobre el Metro, para que las comenten en lo que se comen sus cacahuates japoneses y esperan a ver si consiguen subirse en el próximo y muy atascado tren.
Para que hagan caso a los anuncios que están en los andenes, donde se pide no arrojar objetos a las vías del Metro, es por una muy seria razón… al menos ahora lo sabemos gracias a un descuidado sujeto que, ayer en la estación San Lázaro de la Línea 1, dejó caer su paraguas… provocando una nada espectacular, pero sí dañina explosión.
Resultado de lo anterior, el pobre tipo tendrá que comprarse un nuevo paraguas, ya que el anterior seguro quedó en calidad de chicharrón. Al menos eso suponemos al saber que, por el cortocircuito registrado, tres personas resultaron con quemaduras de primer grado en cara, manos y piernas; sin contar a una menor de 12 años, que resultó algo golpeada entre tanto empujón que se dio entre los alarmados usurarios.
Y para que, después de tanta adrenalina que diariamente se descarga en el Metro, nos siga alcanzando para nuestro “bolillo pa’l susto”, el jefe capitalino, Miguel Ángel Mancera, anunció que la tarifa del servicio se mantendrá en 5 pesotes, al menos hasta el término de su administración.
“No vamos a subir ya la tarifa del Metro, será la misma, así vamos a entregar la administración. Que se despejen los rumores”, pidió el amante de los vuelos en helicóptero, pero que le gusta hacer como que utiliza otros medios… pues para que vean que es bandita.
Explosiones en el Metro sin nada de gravedad que lamentar, más saber que seguiremos pagando lo mismo (por la misma calidad de servicio… no esperemos que mejore), bueno: podemos seguir “celebrando” el nacimiento de las zarigüeyas en el Metro… esperemos que las autoridades las adopten como mascotas del servicio y den chance a los niños de bautizarlas.