Consumir casero y local también es un acto político

Al margen de cuestionarte si en esta temporada decembrina es necesario consumir, a veces de manera innecesaria; en lugar de realizar el ejercicio espiritual que motiva estos festejos; lo cierto es que estamos en la época del año cuando más gastamos, por lo que, si tienes interés en poner tu granito de arena para mejorar este planeta, probablemente comprando local y casero estarás ayudando a tu entorno más de lo que te imaginas.

Consumir casero y local también es un acto político

“¡Listo nuestro menú! #menunavidad #menu #menuañonuevo ¡A la orden! Para el 24… fecha límite de pedido el día 21 de diciembre y para el 31… fecha límite el 28 de diciembre”, posteó Iliana, emprendedora mexicana y propietaria de Ily´s Kitchen; desde su perfil de Facebook.

La carta ofrece variedad de pastas, bacalao, cochinita pibil, guarniciones, postres, ponche y su creación, que ha tenido mucho éxito entre la clientela y por ello la volvió a considerar para este año, la quiche de romeritos con pollo.

Su proyecto de banquetes no surgió como cualquier otra idea romántica del emprendimiento, sino a consecuencia de una necesidad, pues al quedar desempleada durante la pandemia por Covid 19 como administradora de nóminas, optó por tomar cursos de gastronomía para bajar el nivel de estrés y evitar la depresión.

“Mi hijo (recién nacido), necesita de su mamá y necesito paz mental” recuerda que se decía así misma para empoderarse.

Iliana Palafox Trejo descubrió que no lo hacía mal, pues durante sus estudios ganó un concurso estudiantil en la categoría de Creación de Platillo.

Con un rack de cordero marinado en lavanda y jerez de uva palomino fino, bañado en la misma salsa espesada con maíz, sobre una cama de puré de camote amarillo con guarnición de zanahorias rainbow salteadas en diferentes especias, cremini relleno de quelites, tomate cherry, vinagreta de lichi y raviol bicolor de pera.

Otra anécdota que le reveló que estaba en la ruta correcta no sólo del crecimiento económico o profesional, sino también de la autorrealización personal; fue cuando su primer postre —un crumble relleno de fruta— lo ofreció a la puerta del colegio de sus hijos durante la hora de la salida de los alumnos y causó revuelo.

“Las mamás hacían cara de asombro cuando lo probaban… y desde entonces ¡no he parado!”

Aunque tenía en mente dedicarse únicamente a preparar postres, la demanda ha ido creciendo “de boca en boca“, por lo que optó por la elaboración de productos salados y acorde a la temporada.

Como taquizas, chiles en nogada o coyotas sonorenses; en noviembre por ejemplo aseguró que vendió hasta 100 panes de muerto. “¡Vendí muchísimo, fue una locura!”.

Cuando tiene carga de trabajo se hace ayudar por sus compañeros, ahora colegas, de cuando estudiaba, a quienes califica de profesionales.

Y los reconoce como socios más que empleados, pues con ellos construye puentes colaborativos y de intercambio de conocimientos, como si se tratara de una cadena de ayuda mutua entre pares.

Cerca del Parque Hundido en la CDMX se encuentra su centro de operaciones, el cual aún es su casa.

Y desde ahí distribuye sus creaciones a cualquier parte de la ciudad o del área conurbada.

Ya no quiere acaparar las áreas de convivencia de su hogar, pues considera que cada vez le pertenece menos a su familia, por lo que desea mudar a Ily´s Kitchen a un sitio donde pueda producir con más libertad.

Con la posibilidad de presenciar el momento en que los clientes degusten sus creaciones, pues al ver la alegría de éstos en sus rostros cuando prueban sus alimentos, es algo que a Iliana le llena el alma. ¿Acaso pondrá un restaurante?

¿Por qué consumir casero y local también es un acto político?

Diciembre es la época de mayor consumo en México. Durante este mes las personas gastan el doble en comparación a los once restantes porque hay más dinero circulando:

Se reciben tandas, aguinaldos o cajas de ahorro; pero también existe la “cultura del comprar” en torno a la Navidad y los festejos del cierre de año, aseguró Miguel Ángel Ramírez Zaragoza, investigador del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad de la UNAM.

El doctor en sociología explicó que, pese a esta importante derrama económica donde el 10 % la genera sólo la CDMX, lo cierto es que entre el 80 y 85 % de las utilidades se quedan en las grandes cadenas comerciales, ya sea nacionales o extranjeras.

Lo cual representa una gran desventaja para las pequeñas y medianas empresas, ya sea formales e informales.

–Este reportaje surgió por un meme que dice: consumir casero y local también es un acto político, ¿esto pudiera ser verdad? 

–Sí, porque es una forma de protestar frente al capitalismo avasallante.

El consumo barrial o tradicional puede impactar de manera positiva, además de la redistribución equitativa de las ganancias, en otros rubros de la agenda como erradicar la pobreza, al permitir oportunidades a quienes no pueden ingresar a un empleo formal como personas de la tercera edad, madres autónomas, personas en situación de desplazamiento forzado o estudiantes que buscan sostener su proceso educativo, dijo el experto.

El narcotráfico es el quinto empleador en México después Femsa, Walmart México, Manpower, y América Móvil; pero por arriba de Oxxo, Bimbo, Pemex, Coppel y Grupo Salinas, según el estudio Reducir el reclutamiento de los cárteles es la única manera de reducir la violencia en México, publicado por la revista Science en 2023.

Elaborado por los investigadores Rafael Prieto-Curiel, de la Universidad de Oxford, Gian Maria Campedelli de la a Universidad de Trento, Italia; y el analista Alejandro Hope.

Frente a lo anterior, Ramírez Zaragoza abonó en la idea de que comprar, por ejemplo, en la tienda de la esquina, en la tintorería local o la pequeña farmacia; puede servir de apalancamiento para evitar que más personas se vean en la necesidad de reclutarse en las filas del crimen organizado debido a la falta de oportunidades.

“No todo es económico”, afirmó el también académico de la Facultad de Ciencias Politicas y Sociales de la UNAM y de la Escuela Nacional de Trabajo Social; pues considera que el consumo de proximidad repercute en la reconstrucción del tejido social, ya que desde el comercio de barrio se establecen relaciones humanas, al mismo tiempo que se preserva la identidad de los barrios y la defensa del territorio.

El experto dijo que decidir por no consumir a las grandes cadenas transnacionales se puede contribuir también al boicot a ciertas empresas que apoyan el genocidio en Gaza.

Por su parte, el director de la facultad de economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, Alfredo Cuecuecha Mendoza, estimó que en esta temporada los, las y les mexicanes realizan el 12 % del gasto total de todo el año.

Por lo que consideró que “comprar casero o local más que un acto político, es un acto de conciencia que permite asumirnos como ciudadanos de un mundo, al que, si no lo cuidamos, entonces no habrá planeta donde se pueda habitar”.

El especialista en desarrollo económico opinó que el consumo local pudiera tener impacto favorable en el medio ambiente, que tanta falta hace resarcirlo, pues se llegan a producir mercancías que dejan poca huella tóxica.

O bien, que provienen de modelos de economía circular. Es decir, de reciclado y con ello se cambia el paradigma de la economía del descarte, donde lo que se consume se desecha.

“Es necesario educar a los y las consumidores respecto a que sus decisiones para adquirir productos importan porque repercuten en el entorno tanto social como ecológico: necesitamos cambiar, necesitamos hacer las cosas de manera diferente y de cuidarnos entre nosotros“, dijo.

Los doctores Miguel Ángel Ramírez Zaragoza y Alfredo Cuecuecha Mendoza invitan también a cuestionarte si en esta temporada es necesario consumir, a veces más de lo necesario, en lugar de experimentar el ejercicio espiritual y el cual es el objetivo principal de esta época.

El sismo, la pandemia y la economía solidaria

El sismo de 2017 en la Ciudad de México trajo desgracia, pero también milagros.

Uno de ellos fue cuando negocios de la Roma-Condesa sacaron mesas con viandas, agua, café o permitieron el uso de sus sanitarios, cargar celulares o resguardarse del frío para familiares de personas atrapadas o voluntarios para retirar escombros, recordó en entrevista para Sopitas.com Luis Enrique Cienfuegos Velazco, fundador del colectivo Consume Local Fest.

“¡Cómo no olvidar a la ferretería de la esquina en Nuevo León y Sonora que regaló herramientas de construcción para facilitar el trabajo de los rescatistas!”.

Pasó la crisis del temblor y después llegó otra: la pandemia, añadió el promotor y activista del consumo de barrio; quien aseguró que en esta coyuntura “les tocó devolverles el favor” a estos establecimientos de la zona que durante el sismo apoyaron a sus vecinos.

Así fue como nació Consume Local Fest, “una plataforma para dar a conocer, conectar y fortalecer negocios locales”.

“Teníamos 100 contactos de estos negocios y les llamamos durante la pandemia para hacer transmisiones en vivo desde Facebook para que anunciaran sus productos o servicios, cada emprendedor tenía su espacio… por eso le llamamos círculo emprendedor… porque ellos ayudaron y ahora toca ayudarles”.

Una vez que el confinamiento por la pandemia terminó, Consume Fest Local sigue realizando presentaciones virtuales, pero también presenciales y para este 2025 estarán realizando dos.

El proyecto Consume Fest Local también ofrece asesoría a los emprendedores de la zona para ayudarles a mejorar sus estrategias de venta.

Como por ejemplo con entrenamiento en manejo de redes sociales, pues en la red existen adultos y adultos mayores que requieren apoyo para actualizarles en el uso de herramientas digitales. 

El defensor de los derechos de la economía local explicó que desde su experiencia puede identificar que la participación ciudadana para preservar la economía de barrio es fundamental para sostenerse, pues, aunque hay iniciativas de gobierno para impulsar el crecimiento de las Pymes, éstas son insuficientes y tardan mucho en reflejar resultados.

“Sabemos que el comercio a través de aplicaciones cada vez es más común”, por lo que el experto invitó a comprar, en la medida de lo posible, productos nacionales o bien, buscar plataformas mexicanas como el caso de centralenlinea.com.

“Nos hemos dado cuenta que si nos ayudamos y en lugar de ir al Oxxo, que es más caro, elegimos ir a la tiendita de la esquina o a la tintorería de la colonia o a las cocinas de emprendedores; entonces se puede cambiar a un mundo mejor del que vivimos con pequeñas acciones”.