Se llama Gemma Wale (desde el nombre ya nos imaginábamos) y sí, estará en prisión por lo que leyeron en el título de la nota; los bardos escribirán canciones sobre su historia.
Los vecinos aseguran que ella era verdaderamente increíble, que podría ser escuchada gritando y gimiendo desde el otro lado de la calle donde vivía.
Esto dijo una vecina de Gemma:
“Me quejé con ella en muchas ocasiones, pero nunca hizo caso. No importaba la hora del día, ella estaba gritando y gimiendo todo el tiempo. Siempre tuvo cierta reputación, especialmente después de algunos tragos”.
Otros aseguran que la comunidad entera estaba sacada de onda con su comportamiento:
“Todos los vecinos nos juntamos para que se callara, incontables veces tocábamos su puerta a las 3, 4, 5 de la mañana, nos quejamos con la policía y fue ahí hasta que hicieron algo”.
Verán, nuestra nueva amiga tenía algo parecido a una libertad condicional que fue violada con sus escandalosos encuentros por lo que tendrá que pasar un par de semanas en prisión.
Nosotros pensamos que lejos de ir a prisión, deberían de otorgarle una medalla.