El apoyo a los damnificados por “Ingrid” y “Manuel” ha dejado estampas dignas de mención, ya que una vez más se ha mostrado la solidaridad que la sociedad tiene con la gente en desgracia, pero…
Aunque con “buenas intenciones”, nunca falta el personaje que busca un poquito más de reflectores y hasta en los momentos más inconvenientes saca a relucir el cobre. Aquí dos casos dignos de estudio:
Iniciemos con Eleazar García, alcalde de Pachuca, quien –como muchas otras autoridades- convocó a la ciudadanía a cooperar con los damnificados por las lluvias. Sin embargo en un acto innecesario, peligroso y por demás “farol” abordó una camioneta dirigida por un acróbata para así hacerse presente en el centro de acopio.
“Gran reto de nuestro Alcalde Eleazar García Sánchez circulando a 2 llantas para obtener despensas y juguetes!!” fue comentado en la cuenta Facebook del alcalde, que más que en un evento de ayuda parecía estar en promoción de un espectáculo de monster trucks. Sobra decir que a muchos no les quedó claro cuál fue el motivo de la exhibición y en qué consistió el “gran reto” del alcalde.
Y directamente del centro del país, en un helicóptero del Estado de México llegó a Coyuca, Guerrero, -una de las zonas más afectadas por las lluvias- algo más necesario que víveres, agua o equipo de rescate: la señorita Laura.
Ya para qué les decimos a qué fue a la zona de desastre, mejor si tienen el suficiente estómago vean su show. Oportunismo, ¿dónde?
