En la mañana del 19 de septiembre de 1985, un terremoto de 8.1 grados Richter sacudió a la Ciudad de México, provocando el derrumbe de al menos 400 edificios y ocasionando la muerte de más de 10,000 personas. Hoy, a 30 años de este día, seguimos recordando el sismo que cambió nuestra ciudad.
A partir de este día, la Ciudad de México no fue la misma, pareciera que con el desplome de los edificios, también se hubiera desplomado la política y mientras el gobierno era incapaz de atender la emergencia la sociedad civil mostraba su solidaridad y fortaleza como pueblo unido, en las buenas y en las malas.
A las 7:17 de la mañana y en tan solo 2 minutos, se vinieron abajo casas viejas, edificios nuevos, hoteles, antros, oficinas, hospitales, escuelas… el sismo no discriminó ningún sector de la ciudad y arrasó con ella, probando una vez más la fragilidad de nuestras entrañas al momento de afrontar desastres naturales de esta magnitud.
Donde solían estar estas construcciones, tiempo después se construyeron plazas públicas para conmemorar a las más de 10 mil víctimas. Son lugares por los que probabemente pasemos diario sin saber que justo ahí, hace 30 años se venían abajo toneladas de concreto, dejando miles de historias enterradas y trasformando para siempre la Ciudad de México.
Aquí les dejamos fotos de los que solían ser varios lugares antes y después del temblor:
El famoso y lujoso Hotel Regis era el más presigioso de su época, estaba en la esquina de Balderas y Av. Juárez, en el Centro Histórico. Este edificio de ocho pisos vivió épocas cruciales para México como la Revolución o la Expropiación Petrolera. Con el temblor, este gran hotel se vino abajo, generando una fuga de gas que comenzó un incendio. Hoy en día, en este lugar está el Parque Solidaridad, donde cada 19 de Septiembre se realizan homenajes a las víctimas
En la Condesa también hubo muchos daños; aquí vemos un edificio en la esquina de Nuevo León y Laredo destruido, y una foto tomada recientemente muestra cómo es treinta años después esta misma esquina, donde ahora hay un restaurante.
En la transcurrida esquina de Insurgentes y Álvaro Obregón se vinieron abajo varias edificaciones. Actualmente la zona ha cambiado mucho, y ahora hay metrobús, una tienda de azulejos y las oficinas de la Setravi.
Los Televiteatros eran escenarios teatrales muy famosos en la Ciudad, estaban ubicados en Avenida Cuauhtémoc esquina con Avenida Chapultepec, en la Colonia Roma. Este teatro presentó obras como “Vaselina” que protagonizaban los fundadores del grupo Timbiriche, así como “José El Soñador” donde salía Lolita Cortés cuando tenía 14 años. Después del temblor, se destruyeron los Televiteatros y más adelante se construyó el Centro Cultural Telmex.
Donde solía estar el Hotel Continental, ahora se encuentra un gran edificio con las oficinas del CFE .
Gran parte del Hospital General de México se derrumbó y tiempo después de reconstruyó, formando lo que ahora conocemos como el Centro Médico Nacional Siglo XXI, en Av. Cuauhtémoc en la Colonia Doctores.
El Multifamiliar Juárez era en su momento una de las grandes propuestas arquitectónicas de vanguardia, tras el terremoto varios edificios de este complejo se vinieron abajo con familias dentro. Después de esto el lugar fue un tiradero de basura y casacajo durante años y muchos grupos pelaban el lugar para construir departamentos pequeños, pero los vecinos se impusieron a estas iniciativas y finalmente se contruyó el bonito Huerto Urbano de la Ciudad de México, donde crecen todo tipo de frutas y verduras sin pesticidas, recolectan agua de lluvia procesada y limpia, baños ecológicos talleres de cocina, agricultura, composta y demás.
Desde antes del temblor, Tlatelolco siempre fue un lugar muy simbólico en México; ahí nació el pueblo prehispánico Tlatelolca que después fundaron la antigua Tenochtitlán, también en 1968 en Tlatelolco se vivió el asesinato de estudiantes a manos del gobierno mexicano. Durante el sismo, Tlatelolco fue una de las zonas más afectadas, el Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco estaba formado por tres secciones de 15 pisos cada uno, dos de ellas se destruyeron con el terremoto y la tercera fue derrumbada después. En la actualidad en su lugar hay un pasillo con jardineras y juegos.
Y así podemos ver cómo nuestra Ciudad no siempre fue como la conocemos, cómo tantos emblemáticos edificios en cuestión de minutos pasaron a ser cascajo ante un temblor. Hoy vale la pena abrir una espacio para la reflexión, recordando lo que nuestra ciudad ha vivido y conmemorando a las víctimas de este día.
