Esta semana, la Agencia de Archivos Nacionales de Estados Unidos liberó más de 2,800 archivos que contienen información relevante sobre el asesinato de John F. Kennedy, información que había permanecido durante 54 años como “clasificada” y la única persona autorizada para levantar el sello de “secreto de estado” a dichos archivos, era precisamente Donald Trump, quién aprovechó la oportunidad, no sólo para abrir un nuevo frente, sino también con la intención de que los archivos, puedan afectar la credibilidad de las agencias de investigación estadounidenses como la CIA o el FBI, las mismas agencias que le investigan por la trama rusa en las elecciones presidenciales.
Pero si hablamos del asesinato de John F Kennedy ocurrido en 1963, hablamos de muchos mitos urbanos, rumores conspiración y muchas otras historias, entre ellas, la visitas que realizó Harvey Lee Oswald a México en las semanas previas a la muerte de JFK. Sin embargo, aún no es momento de cantar victoria, ya que no sabremos la verdad absoluta respecto al caso, pues si bien se ha revelado el 88% del total de los archivos, una buena parte de la documentación aún es considerada como sensible para la FBI y la CIA, por lo que el mundo tendrá que esperar -al menos- hasta el mes de abril de 2018, para saber más al respecto.
Los Agencia de Archivos Nacionales, informó que los archivos revelados, incluyen documentación del FBI, de la CIA, así como documentos propios de la Agencia, identificados por la Junta de Revisión de Expedientes de Asesinato.
En los próximos 180 días, cada una de las agencias de investigación e inteligencia en Estados Unidos, revisará cada uno de los archivos aún censurados y clasificados por seguridad nacional; con fecha límite al 26 de abril, fecha en la que Trump ordenara la publicación del resto de la información, a menos que las agencias puedan demostrar y argumentar por que deben continuar como confidenciales, de acuerdo con los parámetros que dicta la Ley de 1992.
Uno de los intereses de Trump por hacer públicos los expedientes, tiene que ver con los presuntos nexos que existen con el gobierno Ruso, no obstante, cabe recordar que durante estas décadas, se ha especulado que la agencia Rusa KGB, estuvo involucrado en el asesinato.
¿Pero cómo checar los archivos que han sido liberados?
La nueva información que se ha publicado, se puede revisar en PDF en el sitio archives.org y seguramente serán la fascinación de investigadores, historiadores, y del mundo entero y a ciencia cierta, nos pueden llevar a hacernos una idea de lo que realmente pasó ese 22 de noviembre, en Dallas, Texas.
