Este miércoles, 14 de noviembre, Andrés Manuel López Obrador —acompañado de Alfonso Durazo, su futuro secretario de Seguridad Pública— anunciaba la estrategia de seguridad que veremos en nuestro país durante el sexenio del pejidente. El nombre es un poco más profesional, oficialmente se llama: ‘Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024′ y dio mucho, pero mucho, de qué hablar.
La estrategia en total está conformada de 8 puntos principales, así que no es como que la puedes explicar en un tuitazo. Aún así, en pocas palabras, el plan de seguridad que propone AMLO no está libre de controversia y una que otro revire de lo que había prometido en su campaña.
¿En qué nos afecta? ¿En qué nos beneficia? Pues todos los elementos serán entrenados por el ejercito 😲😐https://t.co/leEAf7SZ2d
— Sopitas (@sopitas) 15 de noviembre de 2018
“Tuvimos que optar entre inconvenientes”, decía el presidente electo durante la conferencia. Y sí, la verdad es que no está fácil. En toda la estrategia hay mención a la corrupción, a la poca confianza en las policías locales y estatales, al narcotráfico y a la creación de una Guardia Nacional. Es en ese último punto donde está lo bravo: estará conformada por militares y no se van a salir de las calles.
Si todo sale de acuerdo al plan, la Guardia Nacional estará integrada a la Policía Naval y Militar, sus primeros elementos serán miembros activos de las Fuerzas Armadas —hasta que empiece el casting de 50 mil elementos nuevos que serán “jóvenes”—, el ejército estará encargado de entrenarlos y trabajarán junto al MP para investigación, detención y presentación de detenidos.
—¡Conocí una chica en Nueva York!—
El anuncio todavía está fresco y los mexicanos pasito a pasito estamos dándole forma al tremendo notición que nos cayó ayer por la noche. Por eso, aunque el debate apenas comienza, vale la pena echarle un ojo a las columnas y análisis de los especialistas que no te puedes perder.
Alejandro Hope en El Universal: “Un plan sin razones para la tranquilidad y el optimismo”
“El plan apuesta por una salida abiertamente militar a los dilemas de seguridad pública. Se plantea la creación de un cuerpo militar (la Guardia Nacional), ubicado administrativamente en la SEDENA, para atender de manera permanente asuntos de policía. Para ello, se propone reformar un tramo no trivial de la Constitución. Y eso puede ser bueno o malo, pero ciertamente no es desmilitarización”.
El plan tiene ausencias notables. Prácticamente no hay nada sobre reforma policial. Poco o nada dice sobre procuración de justicia. La Fiscalía General de la República parece un actor olvidado del diseño estratégico #Opinión de @ahope71 ⬇️ https://t.co/aY4pcul0iN pic.twitter.com/8iIqIPqQlh
— El Universal (@El_Universal_Mx) 15 de noviembre de 2018
El analista de seguridad se fue punto por punto sobre algunos puntos claves de la nueva estrategia. Habla un poco de combate a la corrupción, política de drogas y una total ausencia de reforma policial. Aunque menciona que el asunto “da para muchas columnas”, de algo sí está seguro: en sus primeras impresiones el plan “no lo deja tranquilo y no le da razones para el optimismo”.
José Ignacio Lanzagorta en Sopitas: “Con la violencia, no habrá refinerías y trenes que valgan”
“Todos los puntos quedan ensombrecidos por la continuación de lo más crucial de la estrategia de Felipe Calderón y Enrique Peña: el uso indeterminado de las Fuerzas Armadas fuera del fuero civil y sin fortalecer instituciones –y por tanto responsabilidades- de carácter local. Más de lo mismo pero reetiquetado como una Guardia Civil”
Porque en algún momento y sin indicadores, las canchas de fut, las casitas de colores, la buena onda y la Nobleza de Nuestra Gente nos va a pacificar… ¿Lo otro? Lo otro es temporal. ¿Que cuánto va a durar? Quién sabe. ¿Y los gobiernos estatales? ‘pérate, todavía no.
— Ignacio Lanzagorta (@Jicito) 15 de noviembre de 2018
José Ignacio Lanzagorta escribe en Sopitas.com sobre las realidades de ver el inicio de la violencia en un lejano 2007, la transformación y profesionalización obligada de los especialistas —y asociaciones— dedicados a estudiar la violencia. Sobre todo, se pregunta sobre el futuro. Si “el mandato de pacificar el país no llega”, millones de mexicanos habrán sido ignorados y no habrá trenes y refinerías que valgan.
Julio Hernández (Astillero) en La Jornada: “Plan de paz, militarizado”
“En términos políticos, el Plan de Paz y Seguridad está en camino de dar continuidad a la militarización de facto, mediante el mantenimiento del Ejército y la Marina en las calles para ejecutar funciones correspondientes a las fallidas policías y, en especial, mediante la Guardia Nacional que agregará fuerza y control a los mandos castrenses”.
#Videocharla: #AMLO busca más fuerza militar para pacificar al país. https://t.co/MQtxbCK2ZO vía @YouTube
— Julio Astillero (@julioastillero) 15 de noviembre de 2018
En su columna de este jueves, Astillero no le echó mucha opinión. En una explicación resumida de los anuncios, habla sobre la militarización del país, el nuevo poder del ejército, de una extraña defensa de AMLO sobre el concepto de “familia” y los aplausos que recibió de sus más cercanos colaboradores.
Alfredo Lecona en Aristegui Noticias: “El plan de guerra de López Obrador”
“Las cosas por su nombre. Se puede usar el eufemismo ‘Seguridad Interior’ para disfrazar labores de seguridad pública cuando las realiza el ejército, intentando hacer un fraude a la Constitución. Se le puede llamar ‘Plan de Paz y Seguridad’ a un documento que propone llevar la militarización de la seguridad pública a la constitución y en verdad se trataría de un Plan de Guerra”.
Sobre el #PlanNacionalDePazySeguridad y la #GuardiaNacional, platicamos con Alfredo Lecona (@AlfredoLecona), integrante de #SeguridadSinGuerra, en #AristeguiEnVivo 👉 https://t.co/6uANkO9146 pic.twitter.com/DlvjKCOo8k
— Aristegui Noticias (@AristeguiOnline) 15 de noviembre de 2018
En su artículo, Alfredo Lecona le lanza un reto al Congreso. Considerando que hay tantos legisladores que lucharon por la desmilitarización del país, difícilmente respaldarían la propuesta de López Obrador; a menos, claro, que el partido al que pertenecen pueda más que sus convicciones. Si se están preguntando cuál es su opinión y análisis del Plan de Seguridad de AMLO, con el título basta, ¿no?
Ernesto López Portillo en La Nota Dura en El Financiero
“No hay evidencia empírica disponible que confirme que el despliegue de Fuerzas Armadas disminuya la violencia en México. Si alguien tiene evidencia que la ponga en la mesa. No hay evidencia empírica disponible, sistematizada y confiable que el despliegue de las Fuerzas Armadas reduce la violencia en México”.
“(Con el Plan Nacional de Paz y Seguridad) El presidente electo se recarga, en la confianza, en las Fuerzas Armadas”: Ernesto López Portillo (@elpv68), coordinador del Programa de Seguridad Ciudadana de la Ibero, en #LaNotaDura con @jrisco. pic.twitter.com/XoEeQGWBXJ
— El Financiero TV (@ElFinancieroTv) 15 de noviembre de 2018
Estríctamente esto no es una columna, pero el coordinador del Programa de Seguridad Ciudadana de la Ibero apareció en el programa de El Financiero para dar su análisis de la propuesta de López Obrador. En cierto punto esa pequeña cita lo resume todo: no hay evidencia de que funcione.
La tuitiza de Arturo Ángel, reportero de Animal Político
“Para que no haya dudas. Tomado del documento del plan de AMLO. La Guardia Nacional, a la que el gobierno federal encargará combate a homicidios, secuestros, etc… es una fuerza MILITAR. O sea, el secretario de la Defensa Nacional será el jefe de la policía de México”.
Amigos tan claro como esto: el gobierno de AMLO le está entregando el futuro de la seguridad pública de nuestro país al Ejército y a la Marina. Así tal cual. Ni policía federal ni policías locales. Y lo hará con el aval del Congreso donde tiene mayoría.
— Arturo Angel (@arturoangel20) 15 de noviembre de 2018
Otra vez, esta no es una columna, pero Arturo Ángel, uno de los reporteros más respetados de Animal Político, estaba cubriendo en vivo el anuncio de López Obrador. En su cuenta de Twitter tiene un hilo en el que habla desde el retraso que se aventaron para arrancar la conferencia, hasta “el horror” de vivir en un México donde los militares están encargados de las detención. Vale la pena que lo lean.