En la clásica mañanera del presidente, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez informó que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) aprobó cuatro ensayos clínicos de medicamentos que podrían funcionar para tratar el coronavirus COVID-19.
López-Gatell (“Quédate en casa, quédate en casa, quédate en casa”) además indicó que algunas de estas cuatro pruebas a medicamentos comenzarán a realizarse la siguiente semana.
Al respecto, comentó: “Cuando empezó la epidemia, se acordó que México se incorporara a campos que aplican ensayos clínicos o experiencias de salud pública. Cofepris aprobó tres ensayos y está en proceso la liberación de la autorización del cuarto, son colaboraciones con investigadores de institutos nacionales de salud de Estados Unidos“.
¿Cuáles son estos medicamentos?
El primer ensayo clínico que se hará es al medicamento llamado “remdesivir”, el cual es un farmaco antiviral que ha tenido poco uso en todo el mundo, pero que en palabras del subsecre, parece “promisorio” para las investigaciones preliminares con la finalidad de combatir el coronavirus.
La segunda prueba es al medicamento “tocilizumab”, proteína que bloquea uno de los mecanismos que provoca inflamación de los tejidos, en específico del tejido pulmonar, lo cual, explica López-Gatell, es importante porque la inflamación sobre los pulmones es la principal causa del daño pulmonar agudo grave.
El tercer ensayo clínico es al medicamento “hidroxicloroquina”, usado desde hace tiempo en el tratamiento contra el paludismo, y que también se utiliza para la modulación inmune en enfermedades reumáticas.
La cuarta y última prueba de medicamentos es a la combinación de la “cloroquina” con el antibiótico llamado “azitromicina”.
Finalmente, el subsecretario declaró que se debe esperar, que a pesar de las noticias internacionales que impulsan el uso inmediato de estos medicamentos, se debe tener en claro que de esa forma no funciona la seguridad en el uso de medicamentos “innovadores” para tratar nuevas enfermedades.
“Se debe verificar que su uso no causará daño en las personas, existen estándares internacionales que México sigue para garantizar la bioseguridad, la protección de seres humanos, calidad de investigación y ética”, indicó López-Gatell.
*Con información de El Universal