Justo cuando se están armando los cates en Palacio Nacional contra los órganos autónomos y reguladores, llega una noticia que seguramente va a calentar los ánimos… pero, la verdad —aunque suena aburridona—, es mucho más importante que las discusiones políticas que abundan en ambos lados de la moneda. Este lunes, la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) decidió llevar ante la Suprema Corte la política energética impulsada por la cuatroté.
Así como suena: la COFECE interpuso una controversia constitucional contra la Secretaría de Energía por aquel acuerdo publicado hace unas semanas que fue acusado por frenar la inversión privada en energías limpias e impulsar la quema de combustibles fósiles.
Sin embargo, la controversia constitucional presentada esta tarde no es por presuntos daños ambientales…
En realidad, la COFECE señala que las medidas impulsadas por la Secretaría de Energía violentan los principios fundamentales de competencia. “El instrumento publicado en el DOF afecta de manera grave la estructura económica del sector de electricidad, ya que elimina la posibilidad de que este opere en condiciones de competencia y eficiencia”, señala la Comisión.
También acusan a la cuatroté de darle ventajas a algunos participantes —empiezan con ‘C ‘y terminan con ‘FE dirigida por Manuel Bartlett’.
El acuerdo publicado por la Secretaría de Energía tiene la intención oficial de asegurar la producción de energía eléctrica en México, pues las autoridades acusan que las energías limpias y las empresas privadas no pueden producir constantemente lo necesario. Ante eso, la COFECE señala que las intenciones son buenas… pero que chance las medidas se están pasando de tueste.
“La COFECE solicita a la Suprema Corte de Justicia de la Nación pronunciarse sobre los límites que tiene un regulador sectorial frente a los principios constitucionales de competencia”, explicaban en un comunicado.
El pleito reciente con AMLO
La COFECE, la neta, es que ni aparecía mucho en la discusión pública… hasta ahora.
Al ser un órgano constitucional autónomo dedicado a un sector tan puntual como la competencia económica, nomás las personas especializadas y las empresas conocían de su labor fundamental para ser uno de los árbitros en las reglas del juego financiero mexicano. Sin embargo, en su conferencia de prensa reciente, AMLO les tiró una pedrada y de las fuertes por su trabajo poco visible.
El presidente dijo desconocer su nombre —”¿Cómo creen que me voy a aprender todas esas siglas?”— pero los señaló como parte de una serie de órganos del Estado a los que criticó por “no hacer nada”.