Si Ivonne Ortega, los del PAN y hasta EPN dicen que también ellos son espiados, entonces eso deja a AMLO como el cliente número 1 de aquellos que les gusta fisgonear en las comunicaciones privadas de los llamados “nuevos enemigos del Estado”.
Como sea, el líder de Morena no alardea de esto en el último de sus videos, en el que no le hace que todavía no es candidato oficial a la presidencia (como si no supiéramos ya), pero ya anda prometiendo cosas para que voten por él… digo, por su movimiento.
Cuando triunfe nuestro movimiento va a desaparecer el Cisen, no va a haber espionaje político, se van a garantizar las libertades, no van a haber intervenciones telefónicas.
Para el buen AMLO, en México no hay democracia… al menos no una verdadera, ya que ésta se simula con organismos como el INE y el Trife, en los cuales el gobierno gasta millones de pesos para maicear a sus titulares. Pero si de gastos se trata, donde no se escatima gastos es en el Cisen, donde en “lugar de atender los asuntos de la inseguridad pública (…) se dedican a estar espiando a los opositores, a los periodistas… hasta a los periodistas ‘de casa’”.
Aunque sin hacer alusión directa al artículo mencionado por The New York Times, en donde se acusa que el gobierno mexicano adquirió herramientas de espionaje con el cual ha intentado tener acceso a las comunicaciones privadas de periodistas y activistas, López Obrador señala que la práctica del espionaje es una “estrategia perversa”, propia de un régimen autoritario.
Pero… ¿qué creen? Ahora que llegue Morena al poder, todo eso será cosa del pasado. “Y se va lograr el cambio verdadero en 2018. Este es un régimen caduco, autoritario, corrupto, un régimen putrefacto, ya hay que cambiarlo, por eso es nuestro movimiento, por eso es nuestra lucha”.
Con lo anterior, además de dejar que todos podamos echar chisme a gusto, el gobierno estaría reduciendo importantes gastos: los organismos que sirven para similar la democracia, en los que consejeros y magistrados son “maiceados”, ya no serían necesarios. Y… bueno, pura felicidad.