En las campañas electorales escuchamos mucho del tema y en la transición de gobierno se convirtió en una promesa recurrente de AMLO. Al fin, esta mañana despertamos con el Cisen en tendencia en redes sociales y sólo para saber que los archivos súper secretos del Centro de Investigación y Seguridad Nacional serán abiertos a todo aquel que quiera echarle un ojo.
Y es que por más de dos décadas, el Cisen se convirtió en ese ente político por el que rondaban rumores de espionaje, boicots políticos o sabotajes. Sin embargo, en medio de las declaraciones de AMLO —quien ya le traía ganas a esta institución para desaparecerla— y las precisiones del director del Archivo General de la Nación, que se encargará de resguardar, catalogar y sistematizar los expedientes del Cisen, vale la pena dar una vuelta por su polémica historia.
Ay caray, esto sí nos interesa: ahorita en la conferencia mañanera de AMLO, ha informado que los archivos del CISEN estarán abiertos https://t.co/B9qqHxWxC8
— Sopitas (@sopitas) 1 de marzo de 2019
Del Departamento de Investigación Política y Social al Cisen de Salinas de Gortari
Se supone que el Cisen realizaba —y decimos “realizaba”, porque AMLO también prometió su desaparición— tareas de inteligencia estratégica para asegurar la “estabilidad” del país y del gobierno en turno.
Este Centro de Investigación fue fundado por allá del 13 de febrero de 1989, durante la gestión del expresidente Carlos Salinas de Gortari. Sin embargo, su trayectoria, es decir, su figura como servicio de inteligencia comenzó mucho antes de que Salinas llegara al poder.
El tricolor, con su respectivo presidente en turno, llevó a cabo los mecanismos para fortalecer esa anhelada estabilidad, como cualquier otro gobierno del mundo, como la CIA (Agencia Central de Inteligencia) en Estados Unidos o el Servicio de Inteligencia Extranjera (SVR), en Rusia.
Así que desde que estuvo el PRI en la silla presidencial, se armó de un sistema para proteger a los intereses de la nación.
Para no hacer tanto rollo, en 1942, se fundó el Departamento de Investigación Política y Social, en contexto de la entrada de México a la Segunda Guerra Mundial.
Luego, en 1947 la figura de las tareas de inteligencia pasa a la Dirección Federal de Seguridad. En la década de los 60, esta institución se convierte en la Dirección General de Investigaciones Políticas y Sociales, bajo el mando del entonces polémico presidente Gustavo Díaz Ordaz.
En el 85, el gobierno Federal hace un mix y crea la Dirección General de Investigación y Seguridad Nacional que duró muy poco y en 1989, con Salinas de Gortari, nace el Cisen así como hoy lo conocemos.
La sombra del Cisen
Aunque en la gestión de Salinas se creó el Cisen, el priista no garantizó su inmunidad a las tareas de inteligencia. ¿La razón? De acuerdo con El Universal, el exmandatario fue monitoreado desde 1957 a 1985, por la Dirección Federal de Seguridad y todas las direcciones de inteligencia —de carrera larga y al estilo Hillary Clinton—.
Pero el servicio de inteligencia tuvo para todos. AMLO también cuenta con un expediente y en las elecciones pasadas hubo un escándalo, no precisamente con él, porque el personal del Cisen seguía a nada más y nada menos que al Niño Maravilla, Ricardo Anaya.
▶ ¿El CISEN de verdad espía a los precandidatos? @RicardoAnayaC se quejó de ellos
Ésta fue la #historia de su encuentro pic.twitter.com/G8HyU0AHpA
— Milenio.com (@Milenio) 14 de febrero de 2018
Otra de las cosas por las que el Cisen fue señalado —además del espionaje—, fueron los recursos que se destinaban para sus tareas y el salario de sus empleados. En 2013, por ejemplo, se dieron a conocer los sueldazos que recibía la nómina de cerca de tres mil 500 empleados.
En ese entonces, los salarios de los altos funcionarios oscilaban entre el millón 900 mil pesos y los dos millones 400 mil pesos al año, según Proceso.
¿Un mito?
Y ahí estuvieron las cifras y los señalamientos. Pero en la gestión de Ernesto Zedillo, su secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, negó que el Cisen se dedicara al chisme y boicot político.
“Se han construido demasiados mitos”, calificó Carrasco, pero lo cierto es que el Centro de Investigación, así como sus predecesores, han sido señalados por seguir movimientos políticos como el movimiento estudiantil de 1968, la guerra sucia en la década de los 70 en el sur de México, el movimiento zapatista y hasta el espionaje con el malware Pegasus.
Ordena @INAImexico al CISEN entregar contratos celebrados por adquisición de Pegasus y otros software de espionajepic.twitter.com/N57XSTBQAl
— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) 26 de octubre de 2017
En fin, lo que es un hecho es que estos entes del gobierno han existido desde casi el momento en que se constituyó una “estabilidad política” en el país, con decir que hasta AMLO también planea crear al sustituto del Cisen con la Agencia Nacional de Inteligencia.
**Foto de portada: Cuartoscuro.