Lo que necesitas saber:
Revisamos las declaraciones patrimoniales de Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez. Son todo un circo.
Con las Elecciones 2024 encima, no queríamos que los candidatos a la Presidencia se hicieran guajes con la transparencia. Entonces, buscamos las declaraciones patrimoniales de las tres personas que nos están pidiendo el puesto: Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez.
La verdad es que nos encontramos con un verdadero circo y siendo honestos, ya conocemos el nombre de los payasos.
Les hacemos un resumen con 9 puntos ridículos que encontramos en las declaraciones patrimoniales de Sheinbaum, Xóchitl y Máynez.
Sheinbaum no tiene casas —todo se lo donó a sus hijos
Claudia Sheinbaum reporta que no tiene casas e incluso dice que vive en un departamento rentado. La realidad es un poquito diferente.
La candidata de Morena en realidad tenía una casa en Morelos, una casa en Tlalpan y 2 departamentos en Coyoacán, pero los desapareció de sus declaraciones patrimoniales cuando se las heredó a sus hijos. Públicamente aseguró que una de las casas la construyó con sus propias manos —estando embarazada, mientras detenía la guerra de Vietnam.
Xóchitl tiene una casa bastante sospechosa
Xóchitl Gálvez declaró que tiene una casa con valor de 9 millones 800 mil pesos.
Sin embargo, la construcción de esa vivienda se aprobó cuando ella era jefa delegacional de Miguel Hidalgo y aunque no era precisamente barata, la compró a un 50% de descuento de su valor aproximado. Cazadora de ofertas.
Máynez está jugando al Monopoly
Jorge Álvarez Máynez le está entrando con enjundia a las inversiones de Bienes Raíces.
Tiene una casa de 222 mil pesos —¿dónde las consiguen?—, mientras que en los últimos años ha comprado tres departamentos distintos con valor dxe 13 millones de pesos; al mismo tiempo que adquirió un edificio completo valuado en 2 millones de pesos más.
Claudia es una empresaria altruista (y contaminante)
En sus declaraciones patrimoniales, Claudia Sheinbaum señaló que tiene 8% de acciones en dos empresas de lubricantes industriales. Sin embargo, no le reportan ni un centavo de ingresos —según.
Como dato curioso, una de esas compañías han sido señaladas por la propia Semarnat como una de las 750 empresas más contaminantes de México.
Gálvez le dejó sus empresas a su hija
Xóchitl Gálvez tenía dos empresas, pero en los últimos años las ha ido desapareciendo de su declaración patrimonial con una movida mágica: se las donó a sus hijos.
Entre 2011 y 2015 ha cedido los derechos de estas empresas a su hija. No le pierden.
Máynez no gana ni un clavo de su empresa
Casas, edificios y departamentos… pero no gana ni un clavo de su empresa.
Maynez dice que tiene 20% de una empresa dedicada a la producción y a la impresión de medios masivos, pero asegura que no recibe ninguna remuneración por su participación.
Claudia Sheinbaum es una exitosa inversionista
Quítate, Máster Muñoz. Según sus declaraciones patrimoniales, Claudia Sheinbaum es una exitosa inversionista financiera.
La candidata a la presidencia tiene 2 fondos de inversión que le generan una cantidad impresionante de ingresos: cerca de 2,464 pesos en el año. O sea, cerca de 200 pesos mensuales.
Xóchitl Gálvez le sabe a eso de las adjudicaciones directas
¿Se acuerdan que arriba les contamos que Xóchitl Gálvez había desaparecido algunas empresas de su declaración patrimonial y que no las reportaba como posibles conflictos de interés?
Pues esas mismas empresas ganaron 42 contratos con el Gobierno y según una investigación de Animal Político, en su mayoría (66%) fueron adjudicaciones directas.
Máynez se cambió el sueldo
Esta está medio sospechosa y es que siguiendo con las declaraciones patrimoniales de los candidatos a la presidencia en las Elecciones 2024, el gallo de Movimiento Ciudadano se cambió el sueldo.
Entre 2021 y 2022 se mantenía como Legislador, pero su sueldo bajó en más de 500 mil pesos.
En fin, bienvenidos al circo de las declaraciones patrimoniales en la que Sheinbaum, Xóchitl y Máynez le juegan a la transparencia en las Elecciones 2024 declarando sus ingresos, sus casas o sus trabajos, pero sin hacer mucho sentido. ¿Cómo los ven?