Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), hallaron en un lago de Puebla, la forma de vida más antigua que se conoce en el planeta Tierra.
Contrario a lo que muchos podrían pensar, no se trató de un chile en nogada fosilizado, sino de unos microorganismos que forman estructuras rocosas, conocidas como estromatolitos. El descubrimiento tuvo lugar en el lago Alchichica, ubicado a 109 kilómetros al noreste de la ciudad de Puebla.
Javier Alcocer Durand, investigador de la Facultad de Estudios Superiores de Iztacala y líder del proyecto, señaló que estos microorganismos son similares a los encontrados anteriormente en Cuatro Ciénegas, Coahuila. Un descubrimiento que no sólo puede ser útil para estudiar el origen de la vida en nuestro planeta, sino también para el desarrollo de aplicaciones biotecnológicas gracias a la extraordinaria capacidad de los estromatolitos para adaptarse a condiciones extremas.
Cabe mencionar que Alchichica es producto de una explosión freatomagmática, lo que ocurre cuando agua subterránea se encuentra con el magma en ascenso, provocando una concavidad que eventualmente se llenó con el líquido del manto freático.
Por otro lado, Alcocer Durand indicó que parte de su investigación está enfocada en conocer la forma en que influyen las singulares características del lago en su riqueza taxonómica (de especies), así como el papel que dicho cuerpo acuático desempeña en el control del cambio climático. Esto último debido a la cantidad de dióxido de carbono que despide el lago hacia la atmósfera.
Sin duda alguna, un hallazgo sumamente interesante. Una buena razón para darse una vuelta a territorio poblano, ¿no creen?
Vía: La Jornada