La isla Sandy es una pequeña zona que se ubica en el Pacífico Sur, entre Australia y el Archipiélago de Nueva Caledonia. Un territorio que ha aparecido en varios mapas a través de la historia y que incluso, se puede ver en Google Earth.
¿Y entonces? Bueno, pues que en un reciente viaje de estudio, un grupo de científicos australianos liderado por la geóloga María Seton, se acercaron a bordo de un buque a la zona donde supuestamente debería estar la isla de 27 kilómetros de longitud. El problema fue que para su sorpresa, no encontraron más que un vasto panorama de mar azul y una profundidad de 1,400 metros, según las cartas de navegación.
Debido a este último dato de profundidad, es que los científicos descartan que Sandy se haya hundido, por lo que la única explicación lógica es que se trate de un error en los mapas. Una falla que podría haber tenido origen en la iniciativa Dharma una práctica común de los creadores de mapas, quienes para fines de poder reconocer su versión, añadían arbitrariamente alguna pequeña porción de territorio.
La isla Sandy como un punto negro (izquierda) en Google Earth
De esta forma, el error habría pasado entre el banco de datos de los mapas impresos, hasta llegar a las versiones digitales como la de Google, quienes en una entrevista señalaron: “El mundo es un sitio excitante y muy cambiante, y nosotros trabajamos con autoridades públicas y privadas para llevar los mejores mapas e imágenes a los usuarios”.
A pesar de todo esto, Sandy no aparece en los documentos del gobierno francés, el que en todo caso tendría jurisdicción sobre ella. Es así como ahora sólo resta esperar la debida actualización, que deje fuera de una vez por todas a esta isla fantasma.