La comunidad estudiantil del CIDE se fue a un paro de 24 horas este 2 de mayo de 2023, respondiendo a la convocatoria lanzada hace unos días contra la llamada Ley de Ciencia, que terminó siendo aprobada en un madruguete en el Senado, el pasado 28 y 29 de abril.
La Ley de Ciencia o Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación fue aprobada en las Cámaras (Diputados y Senado) sin mayor bronca, pese a las protestas de un grupo de académicos que exigían un análisis sobre esta iniciativa de AMLO.
Paro en el CIDE en protesta contra la Ley de Ciencia
A grandes rasgos la Ley de Ciencia desaparece al Conacyt y lo sustituye por otro Consejo, condiciona las becas al presupuesto y abre cancha a la participación de las Fuerzas Armadas en la toma de decisiones, por ejemplo.
Y bueno, aquí la comunidad académica y científica abogó por la realización de un parlamento y sus foros para discutir esta iniciativa de AMLO con lupa, pero tuvo poco éxito.
Porque al final, la Ley de Ciencia fue votada en fast track —ahora sí que en corto— en la Cámara de Diputados y el Senado, donde la aprobaron.
Como respuesta, este 2 de mayo la comunidad del CIDE (Centro de Investigación y Docencia Económicas) se fue a un paro de 24 horas, después de que el Colectivo de Participación y Crítica Social realizará una encuesta para ver si se unían a la convocatoria del paro nacional.
Un paro de 24 horas
“Por un lado, militariza la ciencia, retira la autonomía en la administración de la labor científica del país, vulnera el presupuesto asignado a la ciencia y pone en juego la libertad científica. Por otro lado, ha sido impulsada mediante un proceso irregular y poco transparente”.
Aquí parte del comunicado publicado por el Colectivo de Participación y Crítica Social el 1° de mayo sobre el paro contra la Ley de Ciencia.
La decisión de los/las estudiantes del CIDE entra también en contexto de los movimientos que han surgido en universidades como la UAM (donde las estudiantes se levantaron contra la violencia de género), la UNAM (que exige transparencia en los recursos de la Rectoría) y la Ibero (cuyos estudiantes exigen también transparencia en el manejo de los recursos) y ahora, la protesta contra la Ley de Ciencia, que se trata de una respuesta a nivel nacional, sobre un problema general.
