Si gustan, pueden echarse esta nota escuchando de fondo el Discovery de Daft Punk —y tal vez después de leerla, anotar en su agenda una fecha para ver ‘Interestella 5555’, bajo la dirección gráfica del buen Leji Matsumoto— porque, de verdad, la misión Shenzhou-16 de China trae toda esta vibra.
Y también esta misión nos recuerda que la carrera espacial —protagonizada durante la Guerra Fría por Estados Unidos y la URSS— está más presente que nunca, aunque con nuevos protagonistas como son los gobiernos y empresas de China, Rusia, Japón y el clásico: el gabacho.
¿Por qué lo decimos? Este martes 30 de mayo, China dio un gran paso en su programa espacial al enviar la misión Shenzhou-16 —tripulada por 3 astronautas, uno de ellos un civil— a una estación que funcionará como laboratorio. La estación espacial Tiangong o Palacio Celestial.
China envía la misión Shenzhou-16 al espacio
Desde el desierto de Gobi, donde está ubicado el Centro de Lanzamiento de Satélites Jiunquan, China lanzó el cohete Long March-2F que llevó a la misión Shenzhou-16 más allá de las fronteras de la Tierra.
Y rumbo a la estación Tiangong, donde otro grupo de astronautas esperó a este trío para su relevo, porque los primeros se encargaron de terminar la construcción de esta estación a finales de 2022.
Es decir, la misión Shenzhou-16 será la encargada de estrenar esta estación espacial que funcionará a modo de un laboratorio y donde el experimentado Jing Haipeng, Zhu Yangzhu y Gui Haichao —el primer astronauta civil chino y no militar que va a una de estas misiones— permanecerán unos 5 meses en la fase de desarrollo.
China también sueña con la Luna
Antes de que la misión Shenzhou-16 partiera, el lunes 29 de mayo el subdirector de la Agencia Espacial Tripulada China Lin Xiqiang anunció que esta nación también busca llegar a la Luna.
Y que, por lo pronto, ya tienen el plan de enviar una misión tripulada —sí, lo leyeron bien— a la Luna en 2030.
Algo similar a lo planeado por el proyecto Artemis, liderado por la NASA, cuyo objetivo —de entre muchos— es regresar a la Luna en 2025, con ayuda de empresas privadas como Space X (de Elon Musk) o Blue Origin (de Jeff Bezos).
(Japón también anda en esas, apenas en abril de este 2023 intentó que la nave privada Hakuto-R alunizará sin mucho éxito).
Peeeero, regresando a la misión china Shenzhou-16, se espera que la estación Tiangong opere durante 10 años. Vámonos con las increíbles imágenes: