Como si se tratara de una de esas cintas apocalípticas, en las que la gente se agarra a guamazos por las últimas gotas de… bueno, de aquello que al guionista se le antoje que falte, así en Chiapas, donde cada vez es más difícil llegar y decir “lléneme el tanque”.
De acuerdo con empresarios chiapanecos del ramo gasolinero, el vital líquido (para los autos) se encuentra en situación de alarmante escasez: tan solo 20 de las 280 estaciones existentes están operando. Las demás han tenido que cerrar sus bombas debido al desabasto ocasionado por los bloqueos carreteros realizados por maestros y simpatizantes del movimiento magisterial.
“En Tuxtla no hay manera de surtirnos. La terminal está tomada por los maestros. La entrada principal de la ciudad está bloqueada. Todo lo que pueda venir de Pajaritos, Veracruz no está llegando. Ya nos llegó el desabasto de la gasolina”, señaló Pedro Mier y Concha, presidente de la Unión de Empresarios Gasolineros.
“Ahhhh, qué conveniente… crear un intencional desabasto para que la gente se ponga loca y así justificar el uso de la ‘fuerza moderada’ contra los profes… o de menos la puedan vender más cara”, dirá alguno de nuestros malpensados lectores. Pero no, cómo creen. Según el empresario, para los que se dedican a la venta de combustible es imposible guardar el líquido…
“Nosotros no podemos tener tanques alternos. Todo está plenamente registrado en el gobierno federal. No puedo tener un tanque alterno, o fuera de mi gasolinera guardar combustible. Si lo hago mínimo me cae una multa de cinco millones de pesos”.
Como sea, hoy la mayoría de las gasolineras de Chiapas amanecieron cerradas, provocando que, en las pocas que aún dan servicio, se presenten escenas tipo Mad Max: gente haciendo largas filas, insultando a los que se quieren pasar de vivos, desesperada por conseguir aunque sea una anforita o llegando incluso a los golpes.
Claro que, mientras unos sufren la situación, otros la gozan. Como aquellos que de la escasez sacan la abundancia. Así es, como si se trataran de los boletos para ver a Radiohead (los cuales ya se están revendiendo en precios por demás manchados), no faltaron los “abusados” que ni carro tenían, pero bien que fueron a llenar sus garrafas, esperando el momento preciso para ponerle precio a la necesidad del prójimo.
Hasta el momento Pemex no ha anunciado de qué forma puede contrarrestar la situación… pero sí decir qué tan gacha está: se reporta un desabasto del 95%. Por su parte, las autoridades han pedido a los manifestantes que se privilegie el diálogo y se levanten los bloqueos, para así evitar “más afectaciones a la vida económica y productiva de la entidad”.
