No fue una final lucida, ni mucho menos soñada, pero si una, en donde el drama compensó el poco fútbol que Chelsea y Bayern Munich nos regalaron a momentos.
Desde que Chelsea eliminó al Barca y Bayern al Real Madrid, el mundo entero dio como amplio favorito al conjunto alemán, por su capacidad, su localía y sobre todo, por su arsenal ofensivo con Robben, Ribery, Gómez y Müller. En mi caso, porque nunca creí que el Chelsea pudiera repetir las actuaciones defensivas que le llevaron a salir avante ante el Barcelona. De hecho, inocentemente pensé que encararían este partido de una manera diferente.
Desde las primeras horas del día, el Allianz Arena se pintó de rojo, mientras la Marienplatz se preparaba para lo que suponía ser una interminable noche de festejo alemán.
Tanto optimismo, me dio desconfianza, por lo que algo dentro de mi, me decía que al final, Chelsea terminaría dando la sorpresa, con Didier Drogba como héroe…
Al final, tras ochenta minutos de un Bayern que atacaba bien, y un Chelsea que se defendía aún mejor, llegó el remate de Müller.
Tras un partido monotemático, el drama se hizo presente y cuando parecía que el Chelsea pagaría cara su avaricia, llegó Drogba al 89 para mandar el juego a tiempos extras, donde Arjen Robben se dio el lujo de fallar un penal, que pudo significar el titulo para el Bayern.
La calamidad, nos llevó a los penales; donde de nueva cuenta, la localía que para algunos, era a favor del Bayern, terminó jugando en contra, pues el nerviosismo de los presentes, era palpable en cada centímetro del Allianz Arena, llevando incluso a jugadores como Lahm o Muller a levantar los brazos de arriba a abajo para pedir a la gente que se animará y apoyara al equipo.
Vinieron las fallas de Ivica Olic y Bastian Schweinsteiger, seguidos de los aciertos de los que para mi, fueron los dos mejores jugadores del partido, junto con Petr Cech: Ashley Cole y Didier Drogba.
Drogba es uno de esos grandes jugadores a los que por alguna razón, la vida no les había hecho la justicia que merecen; gran jugador, pero mejor ser humano, siendo uno de los principales activistas sociales para ayudar a sus paisanos en Costa de Marfil. Sin decir más, creo que cómo aficionado al fútbol, creo que todos quisieramos que Drogba, jugara para nuestro equipo.
Así, me tocó ver el penal decisivo, desde la tribuna del estadio.
La cara de Drogba en esta foto, tras anotarlo, es simplemente conmovedora, uno de los mejores jugadores africanos de la historia reciente, da el tan soñado título al Chelsea y a Abramovich en lo que pudo haber sido su última jugada como ‘blue’.
Chelsea es nuevo y merecido campeón de la UEFA Champions League, y como fan del Arsenal, sólo puedo celebrarlo, porque con ello, han dejado fuera de la próxima Champions (que finalmente se transmitirá por Fox Sports y ESPN) al Tottenham Hotspur.
Acá una galeria, con las mejores fotos del partido:
