Luego del ataque que sufrió la semana pasada, la revista francesa Charlie Hebdo agotó su tiraje en las primeras horas de este miércoles. Por otra parte, en una ciudad todavía sacudida por los días violentos que se vivieron, las autoridades informaron que 54 personas que defendían o glorificaban el terrorismo fueron detenidas.
El asesinato de 12 personas en las instalaciones de Charlie Hebdo como forma de “vengar al profeta Mahoma” fue el inicio de tres días de emergencia en París, los cuales terminaron el viernes pasado cuando la policía mató a tres hombres armados. Los sobrevivientes del ataque trabajaron en oficinas prestadas y consiguieron hacer un tiraje de 3 millones de ejemplares, 50 veces más de lo habitual.
Así las filas para comprar el primer número de Charlie Hebdo tras el atentado terrorista.
Ante la demanda de un ejemplar del semanario “el editor decidió esta mañana subir la tirada a 5 millones”, declaró Véronique Faujour, presidenta de la distribuidora MLP. En la portada del número de esta semana aparece Mahoma y fue publicado en más de 20 países y en cinco idiomas.
Incluso El diario El País publicó una doble página central del nuevo número del semanario satírico atacado hace una semana. Para ver ampliada la imagen da click.
Por otra parte, la ola de arrestos forma parte de la ofensiva antiterrorismo que se lleva a cabo luego de que en Francia se sufrió el peor ataque en décadas. El portavoz del gobierno francés, Stephane Le Foll, señaló que algunos de los detenidos ya han sido procesados, lo que es una muestra de la rapidez de la justicia. Uno de los detenidos fue el popular comediante Dieudonné.
No es la primera vez que Dieudonné está en problemas con las autoridades: hace tiempo popularizó un saludo que se asemeja al que se realizaba entre miembros de partido nazi, también ha sido condenado en varias ocasiones por racismo y el antisemitismo. Sus provocativas actuaciones fueron prohibidas el año pasado… pero así tiene un gran número de seguidores, principalmente jóvenes… bueno, el peloncito no está tan chavo, pero todavía le gusta hacer bullicio.