Con todo el cinismo del mundo, 29 diputados federales que solicitaron licencia para competir en las elecciones del pasado 7 de junio regresaron esta semana a la Cámara de Diputados a cobrar sus últimas seis quincenas, las cuales sumaban más de 222 mil pesos para cada uno de ellos.
La información anterior se hizo pública a través de la Gaceta Parlamentaria de la Comisión Permanente de la cámara de Diputados, donde se indica que 13 diputados que perdieron en las recientes contiendas solicitaron su regreso a la cámara a partir del 8 de junio; ocho diputados más solicitaron su reingreso a partir de ayer; uno a partir de mañana y siete más a partir de hoy, justo el día en que se cobra la quincena.
Entre los diputados, calificados en las redes sociales como “hambreados”, destaca el perredista José Luis Muñoz Soria, quien perdió la contienda por la jefatura delegacional de Cuauhtémoc a manos de Ricardo Monreal, abanderado de Morena. Otro perdedor que regresa exigiendo su sueldo es el perredista Carlos Augusto Morales López, quien fracasó en obtener la diputación local por Iztapalapa.
Cada diputado federal recibe un salario de 74 mil pesos mensuales, a lo que se suman 45 mil 786 mil pesos por bono por asistencia y 28 mil 772 pesos para “Atención Ciudadana”. A estas cantidades se debe de sumar las partidas discrecionales que reparten los grupos parlamentarios y otras prestaciones económicas.
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