Es seguro que en redes hayan visto un par de imágenes o topado el video de un encuentro entre una brigadista de la Cruz Roja y un migrante en Ceuta —una zona semiautónoma de España, ubicada en la península africana de Tingitana. En la escena internacional, este enclave ha sido protagonista desde el lunes pasado por la llegada de más de ocho mil migrantes.
Esta llegada se trató de una cifra récord que ha impactado en el gobierno de España, cuyo presidente tuvo que cancelar una gira en Francia para lanzarse a esta zona de África.
Emotiva imagen desde el drama de Ceuta. Una trabajadora de la Cruz Roja se abraza a un exhausto inmigrante pic.twitter.com/aH8JrKYush
— EL MUNDO (@elmundoes) May 18, 2021
¿Por qué en un par de días se registró una oleada masiva de migrantes?, ¿cuál es la situación que obliga a estas personas a migrar a pesar de arriesgar su vida para llegar a la Unión Europea?, ¿cuál ha sido la respuesta de España y Marruecos? Van un par de puntos importantes para cachar qué sucede en Ceuta.
Ceuta, España
Antes de entrar a rollos sociopolíticos y diplomáticos, vamos a ubicar a Ceuta: esta es una zona semiautónoma que pertenece a España y junto con Melilla, son las entradas más próximas que tienen los ciudadanos y las ciudadanas de África para llegar a la Unión Europea.
Ceuta está en la península de Tingitana y colinda con Marruecos —desde hace siglos, esta zona ha sido disputada por distintos reinos, desde el portugués hasta el español o marroquí.
Al final, España se quedó a cargo de esta zona, dándole un estado de semiautonomía. Ahora, con los movimientos de migración forzada, el gobierno español debe gestionar los intentos de migrantes para llegar a la Unión Europea vía Ceuta.
Más de ocho mil migrantes llegan al enclave de Ceuta
De acuerdo con el gobierno de España, más de ocho mil migrantes indocumentados han llegado a Ceuta desde el lunes 17 de mayo.
Algunos y algunas migrantes aprovecharon la marea baja para pasar de Marruecos a Ceuta, mientras que otros se atrevieron a nadar desde el territorio marroquí.
Como mencionamos, esta oleada ha sido la mayor registrada hasta el momento para España y ante lo inusual del número de migrantes, España envió al ejército para contener el paso.
A finales de abril ya se había registrado la llegada de alrededor de cien migrantes —que se lanzaron en grupos de 20 a este enclave. Sin embargo, los grupos fueron deportados.
Sin embargo, esta situación se ha acentuado —de acuerdo con medios españoles— por las supuestas fricciones entre los gobiernos de España y Marruecos, país que no ha contenido el paso migrante y, de hecho, ha permitido el “libre” paso a Ceuta.
Brahim Ghali
Y aquí viene otro protagonista. Si bien la ministra de Asuntos Exteriores Arancha González ha dicho que Marruecos aseguró que esta situación no derivó de desacuerdos con España, lo cierto es que este conflicto diplomático se ha desarrollado en medio de la oleada de migrantes. ¿Por?
La respuesta está en la República Árabe Saharaui Democrática —que aún no cuenta con un reconocimiento total a nivel internacional—, cuyo territorio fue ocupado por España y reclamado por Marruecos.
Esta zona del Sahara Occidental fue desocupada por España en los 60 del siglo XX peeeeeero anexada a Marruecos —aunque este país no la tuvo fácil, porque en este territorio ya se había gestado un movimiento independentista que buscaba la constitución de un nuevo país.
Y así pasaron los años y la disputa por este territorio. ¿Qué tiene que ver Ceuta? Recién España asiló a Brahim Ghali, líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, por COVID-19.
Este asilo fue mal visto por Marruecos y ahí resurgieron las tensiones diplomáticas entre España y el reino de Mohamed VI —que va de nuevo, según medios españoles, ha dejado como consecuencia que el país africano haya relajado la vigilancia en sus fronteras.
Los y las migrantes
Ante la facilidad para cruzar a Ceuta, cientos de migrantes se han arriesgado a cruzar la frontera.
Muchas de estas personas huyen de los conflictos armados que se registran en distintos países de África, de la pobreza, la falta de oportunidades y el asedio de grupos criminales.
Su único escape es la Unión Europea —como sucede con los y las migrantes de Centroamérica que buscan llegar a Estados Unidos.
Se sabe que quienes llegan a Ceuta son deportados a Marruecos y, si tienen “suerte”, reciben el estatus de refugiados o refugiadas en España.
La respuesta de la Unión Europea
Según la UE, España no está sola y ayudará al gobierno de Pedro Sánchez en la gestión de esta crisis. Sin embargo, en este camino los funcionarios y las funcionarias europeas vuelven a topar que su política migratoria no es suficiente.
Tal como lo dijo David Sassoli, presidente del Parlamento Europeo: se requiere de una política común para compartir los trabajos referentes a la migración, desde las fronteras de Grecia, Italia y España.