Se fotografió el preciso momento en que un león marino o también llamado foca leopardo atrapa y se come un pingüinito.
El fotógrafo de vida marina, Amos Nachoum, 63, captó en el Antártico la escena en el segundo exacto. Nachoum cuenta cómo fue:
“El pequeño pingüino había entrado en aguas poco profundas para jugar. La foca, que había estado fingiendo ser una roca, entonces le puso una emboscada”
Aquí las increíbles imágenes:
Esto inevitablemente nos hace evocar a Happy Feet, aquella escena de la persecución en donde Mumble sale vivito y coleando. ¿O no?