Y aunque muchos digan “no, güey, ya déjale así”, en la COFEPRIS ya adelantaron que irán contra la sentencia que los hizo emitir la autorización sobre la cannabis industrial.
De acuerdo con el comunicado difundido por la COFEPRIS en sus redes sociales, se tuvo que emitir una autorización para el “cultivo, procesamiento, producción y comercialización de cannabis industrial”. Sin embargo, se hizo en atención a un llamado del Segundo Juzgado de Distrito.
El permiso otorgado a raíz de un juicio de amparo también da chance de la importación de la semilla de la cannabis, así como el procesamiento del material vegetal y producción de aceite de cannabidiol (que, para ello, hasta existen diplomados).
La COFEPRIS aclara que sólo está cumpliendo con sus obligaciones como institución pública, ya que de negarse a emitir el permiso para la cannabis industrial, entonces podría enfrentar multas y destituciones de servidores públicos. Sin embargo, no cuenta la información con la que pueda asegurar que la cannabis industrial es segura… y menos de la forma en que será utilizada por la empresa multinacional que se amparó.
De hecho, la apelación que será presentada por la COFEPRIS contra el permiso que ella mismo emitió será por “el grave riesgo a la salud que una autorización de este tipo representa”.
Con la apelación, la cual fue presentada en coordinación con la Secretaría de Gobernación, se buscará “revertir e invalidar la autorización a fin de proteger la salud de las personas”.
La COFEPRIS insinúa que con este permiso se le da en la torre a la regulación de los productos que contienen cannabis y sus derivados. “Esta labor ha requerido la integración de diversas instituciones que participan en el análisis y elaboración de los distintos elementos normativos indispensables para el adecuado abordaje regulatorio, desde su evaluación documental, análisis científico y vigilancia sanitaria”.
De acuerdo con Aristegui Noticias, la firma canadiense Xebra Brands es la que consiguió el permiso para cultivar, procesar, producir y comercializar la motita en México con fines industriales.
El caminito que siguió Xebra comenzó en 2021 al recibir el permiso para importar semillas, además de autorización para cultivar, procesar, fabricar, vender y exportar productos de cannabis… pero con 1% o menos de THC, la sustancia psicoactiva de la marihuana. El pasado 28 de febrero, la empresa canadiense recibió la autorización definitiva.