Una de las promesas de campaña que confrontó a AMLO con los expresidentes Felipe Calderón y Vicente Fox fue eliminar las pensiones de los exmandatarios para fortalecer la política de austeridad en el gobierno federal. Finalmente, el día llegó y el diputado Mario Delgado dio a conocer que esto ya es un hecho.
“Es oficial: ¡se pone fin a la pensión a ex presidentes!”, tuiteó el morenista al enlazar el dato que publicó el senador de Morena, Martí Batres, con respecto a la Ley de Salarios Máximos —a Vicente Fox no le gusta esto—.
Es oficial: ¡se pone fin a la pensión a ex presidentes! @DiputadosMorena @Mx_Diputados @PartidoMorenaMx https://t.co/qR18M80N9p
— Mario Delgado (@mario_delgado) October 31, 2018
¿De qué va la Ley de Salarios Máximos?
Antes de indignarnos o alegrarnos por las modificaciones y el fin de las pensiones para los exmandatarios es necesario saber que en septiembre pasado la bancada de Morena en la Cámara de Diputados desempolvó la Ley reglamentaria a los artículos 75 y 127 de la Constitución —que regula las remuneraciones de los funcionarios—.
Ningún funcionario podrá ganar más que el presidente
De acuerdo con la ley reglamentaria de los artículos 75 y 127 ningún servidor público puede tener una remuneración o retribución por su cargo o comisión mayor a la del Ejecutivo Federal.
Si esto llegara a suceder, de acuerdo con la adición del Título Décimo Libro Segundo “Delitos Cometidos por Servidores Públicos”, del Código Penal Federal, se castigará a los responsables con su destitución e inhabilitación, hasta por 14 años en cualquier cargo público.
— Martí Batres (@martibatres) October 31, 2018
En aquella ocasión, en la Cámara de Diputados, también se puso el acento en las pensiones de los exmandatarios. ¿Cómo?
Pensiones a expresidentes
“El ordenamiento considera remuneración a toda retribución en efectivo o especie, incluyendo dietas, aguinaldos, gratificaciones, premios, recompensas, bonos, estímulos, comisiones, compensaciones…” se lee en el boletín 0066 publicado en la página de la Cámara de Diputados sobre las modificaciones propuestas.
Según el documento, los apoyos y gastos sujetos a comprobación que vayan acorde con el trabajo y gastos oficiales de los funcionarios podrán ser válidos.
Y ojo aquí: “no forman parte de la remuneración los recursos que perciban los servidores públicos, en términos de ley o decreto legislativo… relacionados con jubilaciones, pensiones o haberes de retiro, liquidaciones por servicios prestados” ni los servicios de seguridad.
En cumplimiento de la atribución que me confiere el inciso b) del artículo 72 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, una vez cumplidos los plazos, he ordenado la publicación de la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos en el Diario Oficial. pic.twitter.com/h1JSzf1fND
— Martí Batres (@martibatres) October 31, 2018
Esto fue lo que la Cámara de Diputados aprobó en septiembre pasado —en lo particular y general—: la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos.
Batres pide su publicación
Se supone que los diputados enviaron estas modificaciones al presidente Enrique Peña Nieto —quien tenía que checar de qué iba—. Sin embargo, su plazo terminó y el presidente del Senado, Martí Batres, se encargó, de acuerdo a lo permitido en sus funciones, de ordenar su publicación en el Diario Oficial.
Es decir, con su publicación, los cambios serán oficiales y no habrán acuerdos expedidos —en este caso los que fueron expedidos por el expresidente Luis Echeverría o López Portillo para blindarse con las pensiones— para perpetuar esta vieja costumbre presidencial.