Con 50 votos a favor y 48 en contra, este sábado 6 de octubre el Senado ha confirmado a Brett Kavanaugh como el noveno juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos. Ahora Kavanaugh pasará a ser uno de los nueve jueces vitalicios que conforman el Tribunal Supremo, y ocupará el cargo que el juez Arthur Kennedy, dejó en junio pasado.
Afuera de la Suprema Corte, varios manifestantes protestaron la decisión, según información de varios medios estadounidenses muchos fueron arrestados. Por otro lado, el presidente Donald Trump aplaudió la votación que le dio la chamba a Kavanaugh, e indicó que el ahora juez prestará juramento más tarde:
I applaud and congratulate the U.S. Senate for confirming our GREAT NOMINEE, Judge Brett Kavanaugh, to the United States Supreme Court. Later today, I will sign his Commission of Appointment, and he will be officially sworn in. Very exciting!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 6 de octubre de 2018
En los últimos meses la llegada de Brett Kavanaugh causó mucho revuelo en el país vecino. Primero por el hecho de que fue nominado por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que tiene fama de todo menos de ser un ejemplo de la democracia. Aunque lo preocupante de esto es que Arthur Kennedy funcionaba como el centro ideológico de La Corte Suprema de Estados Unidos, pues no era ni tan republicano ni tan demócrata, y en sus manos quedaba dar el veredicto en las votaciones difíciles. Ahora que Kavanaugh ha llegado al puesto, se teme de que su ideología de republicano conservador afecte cuestiones importantes como el aborto, la pena de muerte, inmigración, etc.
Y hace unos meses eso parecía ser lo peor del caso de Kavanaugh, hasta que en septiembre pasado se dio a conocer el testimonio de Christine Blasey Ford, una profesora de universidad que acusó al juez Kavanaugh de agredirla sexualmente en una fiesta cuando ella tenía 15 años y él 17. A esa acusación se sumaron dos más y aunque el caso se llevó a la corte, y hasta se dijo que el FBI tenía ya un expediente por casos de abuso, al final parece que las pruebas no fueron suficientes para evitar que Brett Kavanaugh llegara al Supremo.
Este evento provocó marchas donde varios se manifestaban en contra de que Kavanaugh llegara al poder. En la última personalidades como Amy Schumer y Emily Ratajkowski, fueron arrestadas, lo que además dejó ver lo grave que es la censura y la libertad de expresión en países de primer mundo como lo es Estados Unidos y lo que podremos esperar muchos con las nuevas decisiones que se tomen próximamente en la Suprema Corte estadounidense.
