Jim Dingilian es un artista nacido en York que realiza un trabajo sumamente interesante. Básicamente se dedica a pintar paisajes de humo dentro de las botellas.
Como podrás ver, sus materiales no son meramente anecdóticos, sino que constituyen una visión artística y nostálgica del pasado. El efecto evanescente sobre sus paisajes suburbanos tocarán las fibras de aquellos que crecieron en lugares así. La memoria encerrada en una botella y los paisajes que parecen tan cercanos y tan dispuestos a desaparecer construyen una sensación extraña. Sólo los que han vivido en los suburbios o en lugares parecidos podrán entender el sentimiento que transmite Dingilian.
Para ejecutar estas piezas, el artista comienza por llenar de humo las botellas y luego borra sus rastros. El resultado es estremecedor: