El pasado viernes 21 de abril una de las taquerías más populares de la Ciudad de México fue el centro de atención de las redes sociales y los medios de comunicación. El Borrego Viudo, establecimiento ubicado en la delegación Miguel Hidalgo, fue clausurado por el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) en condiciones poco transparentes. El titular del organismo, Meyer Klip, indicó que la clausura momentánea de la taquería se debía a que había un “problema de uso de suelo“, mientras que los dueños del local aseguraron que las autoridades del instituto los habían tratado de extorsionar por una suma de 100 mil pesos. Con las horas, al caso le han surgido más aristas y atenuantes. Verónica Villagrana, propietaria del Borrego Viudo, acusó que el grupo delictivo La Unión Tepito la desalojó a ella y sus trabajadores el pasado 12 de marzo y, desde entonces, la organización vinculada con narcotráfico y homicidios tiene la taquería bajo su control.
Lo más grave del caso, de acuerdo con Villagrana, es que la delegada Xóchitl Gálvez y la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México están enterados del desalojo perpetrado por su primo Conrado Villagrana. De repente, lo que parecía una clausura de rutina se volvió en una telenovela aderezada con conflictos familiares, tráfico de influencias, extorsión y muchos tacos. Peor aun: lejos de auxiliar a los propietarios, afirmó Verónica Villagrana para el diario Reforma, la delegación y la corporación policiaca han trabajado “en contubernio” para despojarlos de su taquería. La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México indicó que había abierto una carpeta de investigación por el presunto delito de extorsión y que girarían “los citatorios correspondientes y se iniciará los trabajos de inteligencia necesarios”.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa, declaró que hasta el momento no había denuncia alguna sobre la presunta participación de La Unión Tepito en la taquería. El mandatario capitalino invitó a aquellos que tengan información o quieran comentar sobre el asunto a que declaren ante la procuraduría capitalina (no, pues sí). Por su parte, la delegada de Miguel Hidalgo continuó en el talante de Mancera Espinosa y pidió a los ciudadanos de la demarcación a denunciar irregularidades y delitos a la PGJ. Gálvez afirmó que a ella como delegada sólo le compete que el giro mercantil del Borrego Viudo esté en orden y que el tema de quién es el dueño es competencia de alguien más. Xóchitl también dijo que varios comerciantes en Miguel Hidalgo se han quejado de extorsiones por parte del personal del INVEA, por lo cual les recomienda presentar su denuncia ante el Ministerio Público y llevar pruebas.
Según Bajo Reserva, la sección de trascendidos del periódico El Universal, el caso del Borrego Viudo destaparía “una cloaca en la que las autoridades capitalinas podrían salir salpicadas”.
(*El artículo original tenía la fecha equivocada e indicaba que el evento se había registrado en diciembre, le pedimos una disculpa a nuestros lectores).