Luego de echarse durante varios meses una disputa con Ismael Figueroa, líder sindical del gremio (que hasta con va para diputado federal), el que fuera director del heroico Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México, Raúl Esquivel, anunció su retiro del cargo.

Vía Twitter y sin dar más explicaciones, Esquivel –con 48 años de servicio– agradeció al jefe del gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, el apoyo brindado durante su administración y adelantó que se incorporará a “otras tareas”, las cuales le serán encomendadas por el propio administrador de la CDMX (nomás que se apure, porque Mancera se va… y bye, bye, chambas).

De acuerdo con Reforma, el llamado Jefe Vulcano denunció en varias ocasiones y ante el propio gobierno capitalino el hostigamiento del que era víctimas por parte del líder del Sindicato de Bomberos, Ismael Figueroa. ¿Y por qué molestar al cabeza de los bomberos capitalinos? Según el propio Esquivel, para obligar su renuncia.

Según diversos medios, fue tal el grado de presión que el Sindicato metió sobre el jefe de los “traga fuego” de la CDMX que – mínimo en tres ocasiones – fue bloqueado por Figueroa y su gente para obligarlo a firmar su renuncia. Sobre este asunto tenía conocimiento Miguel Ángel Mancera, pero nunca se pronunció al respecto, dejándole la chamba a su secretario, Luis Serna, quien –supuestamente– hizo que Figueroa se comprometiera a no interferir en la operatividad de la corporación, cosa que finalmente no se cumplió. Según el único facultado para solicitar su renuncia era Miguel Ángel Mancera, lo cual habría ocurrido ayer.

Pero quien sí renunció y de muy buena gana a su cargo como secretario general del Sindicato de Bomberos fue Figueroa, para buscar una diputación federal con el Frente PAN-PRD. o hay ningún conflicto con el Jefe Vulcano. Es un conflicto que el jefe vulcano fantaseó. Yo lo invito a que ya reflexione y a que cumpla con sus obligaciones. Ojalá el pueda contestar lo que realmente ayer denunciaron parte de la estructura. No fue el sindicato, fue la estructura. Y ojalá y el pueda resolver las acusaciones que le dicen. No hay ningún conflicto”, señaló el ahora exlíder sindical.

Un día antes de que Figueroa presentara su renuncia, un grupo allegado a él protestó frente a las instalaciones de la Estación Central de Bomberos, acusando la baja injustificada de tres elementos. Sin embargo, cercanos al Jefe Vulcano señalaron que la protesta, así como otras presentadas con anterioridad, eran parte del “golpeteo” organizado por Figueroa. “Estas personas eran personal de estructura, no son operativos, y depende del Jefe Vulcano y por ley tiene la capacidad de terminar la relación laboral cuando lo decida”, señalaron para Reforma.

Tres días después de la renuncia de Figueroa, ahora Esquivel hace lo propio, todo sin que el gobierno capitalino se pronuncie al respecto.

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