Lo que necesitas saber:
Desde hace meses los republicanos y demócratas están en un estira y afloja sobre un proyecto de ley sobre seguridad fronteriza y migración.
Ah, caray. Este 26 de enero el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, publicó una declaración que está dando de qué hablar: si se aprueba una ley bipartidista en el Congreso sobre seguridad fronteriza, pensaría en cerrar la frontera con México de emergencia.
Pero ¿a qué se refiere con cerrar la frontera? ¿de qué ley habla? ¿cuáles son las negociaciones detrás que quiere empujar?
Las negociaciones sobre seguridad en la frontera de Estados Unidos con México
“Lo que se ha negociado sería –si se convierte en ley– el conjunto de reformas más duras y justas para asegurar la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país. Me daría, como presidente, una nueva autoridad de emergencia para cerrar la frontera cuando se vea abrumada. Y si tuviera esa autoridad, la usaría el día que firme el proyecto de ley“, se lee en la declaración.
Pero ¿a qué se refiere? De acuerdo con Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, durante el año fiscal 2023 la Patrulla Fronteriza arrestó al menos a 3 millones de migrantes en la frontera con México. Y la tendencia va a la alza.
Los números apuntan a que durante la presidencia de Donald Trump el punto máximo de detenciones llegó a 852 mil personas en 2019. Es por eso que los republicanos acusan que Biden aumentó la crisis de migrantes en la frontera aflojando las restricciones de Trump.
No se puede negar que la migración es uno de los temas principales sobre la mesa de las elecciones presidenciales que se acercan. El asunto es que republicanos y demócratas tienen visiones y proyectos distintos… y el tiempo se acaba antes de las votaciones.
Por ejemplo, el presidente republicano en la Cámara de Representantes, Mike Johnson, ha declarado que Joe Biden necesita regresar las políticas de Trump. Incluso ha pedido al Senado (que está liderado por demócratas) que se apruebe un proyecto de ley para terminar con el fin del asilo en la frontera.
La conocida como HR 2 que aún no ha llegado al Senado, donde se toparía con los demócratas. La Casa Blanca, claro, no aprobaría este proyecto y lo vetaría.
¿De qué hablamos? Bueno pues se prohibe a los migrantes buscar asilo en Estados Unidos si pasan por otro país en la ruta. Además le daría autoridad al secretario de Seguridad Nacional gringo para suspender la entrada de migrantes.
Y claro, exige la construcción de al menos mil 400 kilómetros de muro, acabaría con los programas de libertad condicional, etc.
Del otro lado de la moneda, el proyecto de los demócratas (impulsado por Biden) pide miles de millones de dólares para meterle más agentes a la Patrulla Fronteriza, nuevos agentes de asilo, nuevos equipos de jueces, etc. No para frenarlos, sí para gestionar su llegada de mejor manera.
Y ahí están, en el estira y afloja. Desde hace meses un grupo bipartidista (republicanos y demócratas) han estado negociando un posible acuerdo que contemple la ayuda a Ucrania (que está frenada) con la seguridad fronteriza con México.
La idea es poder llegar a un acuerdo a la mitad de las posturas para ya poner en marcha un plan. A este acuerdo se refiere Joe Biden, el que se “tiene que aprobar ya”.
“Para todos los que exigen un control fronterizo más estricto, esta es la manera de hacerlo. Si se toma en serio la crisis fronteriza, apruebe un proyecto de ley bipartidista y yo lo firmaré“, se lee desde la Casa Blanca como un empuje para que esto se apruebe, al menos solo desde el Senado como primer paso.
¿Y por qué hay prisa? Bueno, la postura de Donald Trump es que los republicanos no deben negociar ni ceder ante un proyecto que no contemple el cierre definitivo de solicitudes de asilo en Estados Unidos.
