A principio de esta semana, les mostramos el que probablemente participe para ser elegido el mejor lanzamiento en la historia de beisbol, algo sin igual. Ahora, chequen lo que una cámara captó en otro juego del “rey de los deportes”.
En un partido de ligas menores entre Erie Seawolves y el Altoona Curve, el tercera base Bradon Douglas (perteneciente a los Tigres de Detroit) mandó una bola a las gradas, pero no para un jonrón, sino para un batazo de foul. Algo que le sucede constantemente a los bateadores.
Pero eso no es lo increíble. Lo llamativo fue que la bola no cayó en las manos de algún fanático, sino en el mismísmo portavasos de un asiento. ¡Tal como lo leen! Fue un “enceste” perfecto por parte de Brandon Douglas.
Hasta el cronista del juego exclamó: “¡Eso fue tremendo!”
Veánlo con sus propios ojos:
Ni prácticándolo cien veces le vuelve a salir. Es de esos tiros que con una sola vez que le salga es suficiente. Ya luego una señora se vio fregona y se quedó con la pelota…
