Franceses, polacos, alemanes, pero sobre todo irlandeses. Estas personas integraron el famoso Batallón de San Patricio que ayudó a México en la guerra de intervención contra Estados Unidos.
Aquí en México cada mes de septiembre o 17 de marzo —día de la fiesta de San Patricio— nos acordamos de este batallón, hay quienes brindan a su nombre y bueno los institutos de Cultura se dedican a difundir su historia.
Y por acá de una vez les contamos 10 datos que deben saber del Batallón de San Patricio.
El Batallón de San Patricio
Este batallón estaba integrado por un grupo de hombres originarios de Francia, Alemania, Polonia y en su mayoría de Irlanda, que habían migrado a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades.
En el caso de los migrantes irlandeses, su llegada a Estados unidos fue porque huían de la gran hambruna de la década de 1840, que provocó la muerte de un millón de personas y que llegó a su punto extremo en 1845.
La Secretaría de Culturay y el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) cuentan que estas personas veían en el Ejército gabacho una oportunidad para poder sobrevivir, tras ser rechazadas hasta en los empleos más simples. Aunque está opción (el Ejército) no era la mejor.
Discriminación en el Ejército
En las filas del Ejército gabacho también había discriminación y abusos entre iguales. Las personas del mismo bando.
Los abusos eran por jerarquía, origen y hasta religión. Esta última caló fuerte entre los irlandeses católicos que se sentían asediados por profesar su religión.
La guerra México-Estados Unidos
Este es un largo y doloroso capítulo de la historia mexicana, que sucede en contexto de los planes de expansión de Estados Unidos y la independencia de nuestro país.
Revisemos rápido cómo estuvo la cosa: a partir de la compra de Luisiana en 1803 y del tratado Adams-Onís, con el que España le dio al gaba la Península de la Florida, Estados Unidos le echó el ojo a otros territorios, más allá de sus fronteras.
Luego entre 1829 y 1845 hubo un conflicto indirecto entre Estados Unidos y México por Texas. Sí, este estado en ese entonces mexa había recibido una buena parte de la población gabacha, lo que propició su intento por independizarse hasta lograrlo, para después anexarse a Estados Unidos (en 1845).
Ahí no terminaron las fricciones, porque Estados Unidos intentó hacerse de más territorio mexicano hasta que en 1846 nos declaró la guerra o bueno, a nuestras generaciones pasadas.
Ya todo mundo sabe cómo terminó esta historia (eso lo cuentan desde primaria). Con el Tratado de Guadalupe-Hidalgo, firmado en febrero de 1848 y en el que México pierde… agárrense:
Alta California, Nevada, Utah, Nuevo México, Colorado, Arizona y partes de Wyoming, Kansas y Oklahoma; además de que nuestro país se comprometió a NO reclamar Texas y establecer la frontera a partir del Río Bravo. Ya con eso, Estados Unidos sacó a su ejército de México en junio de 1848.
Los San Patricios
Regresamos con el batallón. Conocidos como los San Patricios, este grupo tomó su nombre del santo patrono de Irlanda y llegó a combatir bajo las órdenes de Zachary Taylor.
Como les platicamos más arriba, los abusos a las personas migrantes dentro del Ejército era una constante, así que por esta y otras razones —como la promesa de tener tierras en México si peleaban a su lado—, decenas de hombres desertaron de Estados Unidos para unirse al bando mexicano.
John O’Reilly
John O’ Reilly o Juan Reely pasó a la historia mexicana como uno de los primeros en desertar del Ejército estadunidense y, además, por incentivar a sus compatriotas a hacer lo mismo.
Reilly nació en Irlanda en 1795. Migró al continente americano tras luchar contra los ingleses en su país y una vez en América, John se movió a Canadá y Estados Unidos, donde ingresó al ejército para conseguir la nacionalidad. Pero en marzo de 1846 desertó junto con otros soldados para unirse al Ejército de México.
Identificación con México
Durante las expediciones militares, los San Patricios conocieron el territorio mexicano y, según relata la Secretaría de Cultura, se identificaron con la población mexicana.
Sobre todo porque acá en México se profesaba la religión católica y porque irlandeses y mexicanos compartían el mismo asedio de los militares estadunidenses. Con estas coincidencias, los patricios tuvieron la confianza de cambiar de bando.
Las batallas
El Batallón de San Patricio participó en las batallas de Matamoros, Monterrey, La Angostura, Cerro Gordo y Churubusco, esta última en agosto de 1847.
Se dice que ahí, alrededor de 200 militares extranjeros lucharon codo a codo con México para defender el Convento de Santa María de los Ángeles.
Batalla de Churubusco
El 20 de agosto de 1847 los ejércitos del gaba y mexicano pelaron en el convento de Santa María (hoy Museo de las intervenciones), en lo que hoy es la alcaldía Coyoacán, Ciudad de México.
9-13 de septiembre
Esta batalla significó la derrota para el Batallón de San Patricio, pues el 60% de sus integrantes murieron, fueron heridos o hechos prisioneros.
Al ser capturados, el Ejército de Estados Unidos no dudó en castigarlos, juzgarlos y condenarlos a la horca entre el 10 y 13 de septiembre de 1847 en San Ángel y Mixcoac.
Plaza de San Jacinto
Si alguna vez se han dado una vuelta por esta plaza —referente de la colonia San Ángel y la alcaldía Álvaro Obregón por su historia y la venta sabatina de pinturas y artesanías—, seguro se han topado con la placa conmemorativa dedicada al Batalló de San Patricio. Esta placa fue colocada 112 años después de la caída del batallón.
**Con información del INEHRM y Secretaría de Cultura.