Sigue la mata dando. El caso de la Casa Gris, embarcadero del hijo de AMLO, José Ramón López Beltrán, sigue sobre la mesa. Y es que este 21 de febrero la empresa Baker Hughes presentó los resultados de la investigación interna que llevaron a cabo para analizar la situación: no hay conflicto de interés ni nada.
En una conferencia de prensa, el vicepresidente para México y Latinoamérica explicó que entre la compañía y José Ramón López Beltrán no hay conflicto de interés y que, de hecho, la compañía nunca tuvo trato directo ni con Pemex ni con ningún funcionario del gobierno.
“No encontramos ningún conflicto de interés ni nada irregular”, subraya vocero de Baker Hughes en conferencia de prensa este lunes. Aclara que Keith L. Schilling fue líder de ventas en EU y luego en Canadá. “No tuvo ningún contacto con México ni con @Pemex”, sentencia. pic.twitter.com/tAKexh2rFG
— Jenaro Villamil (@jenarovillamil) February 22, 2022
El conflicto de interés por la Casa Gris
Durante este encuentro con la prensa, el representante de la corporación explicó que Keith Schilling, el mero dueño de la casa, fue empleado durante 2016 pero que dejó de chambear ahí en diciembre de 2019.
Afirmaron que durante ese tiempo él trabajo para el grupo de Norteamérica y México está en el grupo de Latinoamérica.
Para esta investigación se contrató a un despacho externo de inteligencia corporativa y se hicieron estudios forenses a archivos, correos, documentación, responsabilidades y proyectos. Concluyen que todo se trató de una “transacción de curso ordinario en condiciones de igualdad entre todas las partes”. Que la empresa no sabía del acuerdo de alquiler y que no recibió beneficios.
Recordemos que recientemente la Fiscalía General de la República (FGR) inició una carpeta de investigación por presunta corrupción en el caso que fue puesto sobre la mesa por Latinus y Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.
La “Casa Gris”: FGR abre investigación por el caso de José Ramón López Beltrán
