Muchos pensarán que nada le costaba hacerle el favor a la doña, pero ¿quién se atrevía a ponerle el cascabel al gato?
Seguro muchos tienen la fantasía de tener sexo en un avión. Esta mujer también, nada más que le tocó un acompañante que no estaba en la misma sintonía. (o sea, borracho).
En un vuelo de Delta Airlines, una mujer luego de echarse unos traguitos le comenzó a acariciar la rodilla al pasajero que tenía al lado, pero nomás el susodicho se hizo del rogar y le dio un tajante “no” a las pretensiones sexuales que la dama tenía.
Todo estaba puesto para que de menos se echaran un rapidín: una mujer ebria de alcohol y deseos, un baño pequeño pero acogedor –y algo sucio-, el ruido de los motores para apagar los alaridos y en fin… la escena romántica no se concretó.
Escoltada por la policía –la cual tampoco le quiso hacer el favorcito- la mujer amenazó con matar al hombre que se encontraba sentada a su lado. Testigos del curioso hecho hicieron la respectiva grabación en el interior del vuelo con destino a Salt Lake City.